martes, 31 de diciembre de 2013
martes, 5 de noviembre de 2013
Para comprender mejor el ideal de justicia- ÉTICA NICOMAQUEA – ARISTÓTELES LIBRO V: DE LA JUSTICIA
Primeramente
Aristóteles, hace una importante distinción entre la igualdad y la legalidad,
adjudicando lo igual y lo legal a lo justo, y por ende, lo ilegal y desigual a
lo injusto, siendo estas dos formas respectivamente, maneras de comprensión
sobre una injusticia/ justicia total y una cierta especie de lo justo e injusto
(igualdad-legalidad/desigualdad-ilegalidad); llama a la justicia la “virtud
total” porque es un bien ajeno, es decir, no es el que emplea la virtud para si
mismo, sino para otro. Por el contrario, a la injusticia la conceptualiza como el “vicio todo”. Lo justo es lo igual y lo
injusto lo desigual- pronuncia Aristóteles en su obra- hay un término medio de
lo desigual que es lo igual, es decir, lo igual es el medio entre dos extremos
(lo más y lo menos), por tanto supone dos cosas (los extremos), y lo justo es
por lo tanto, una especie de medio y supone 4 términos: las personas par las
cuales se da algo justo (son 2) y las cosas en las que se da (son 2).
Aristóteles
nos plantea dos tipos de justicia, la distributiva y la correctiva. Respecto de
la primera, responde a una justicia como igual, es decir, la distribución de
honores o riquezas o de otras cosas que puedan repartirse entre los miembros de
la república, en los cuales puede haber desigualdad e igualdad entre uno y
otro; por tanto lo justo distributivo, se refiere a las cosas comunes y es
siempre conforme a una proporción. Por su parte, la correctiva, responde a una
justicia legal, es decir, que desempeña una función correctiva o conmutaciones
privadas; de las cuales se desprenden dos partes: las transacciones privadas
voluntarias, porque el principio de semejantes relaciones es voluntario, y
respecto de las involuntarias, tenemos dos sub clasificaciones, las clandestinas – hurto, adulterio, envenenamiento,
etc.-, y las violentas – secuestro, homicidio, sevicia, robo con violencia,
mutilación-.
La
igualdad será la misma entre las personas que entre las cosas, si las personas
NO son iguales, NO tendrán cosas iguales. Lo justo es proporcional- decía
Aristóteles- lo proporcional es una igualdad de razones que se da en 4
términos: emplea un término como si fuesen dos y lo repite (A es a B, así B es
a C). Pero también lo justo está determinado en 4 términos, la razón en una
pareja es la misma que hay en otra pareja, es decir, como el primer término es
al segundo, así el tercero será al cuarto (1:2 así 3:4), de la misma manera así
como el primero es al tercero como el segundo será al cuarto (1:3 así 2:4). Así
pues la unión (unión del 1 con el 3 y del 2 con el 4) es lo justo en la
distribución, lo justo es entonces, como ya decíamos, un medio entre los
extremos desproporcionados, porque la proporción (en este caso es una
proporción continua) es un medio y lo justo una proporción, por tanto, lo
injusto es lo que está fuera de la proporción lo cual puede ser en más o en
menos. En la práctica dice el filósofo griego, que el que comete injusticia
tiene más y el que la sufre, menos de lo que estaría bien. En el caso de lo
justo como legal (justicia correctiva) la proporción será aritmética, aquí es
indiferente la benignidad o maldad de las partes, sino que la ley atenderá a la
diferencia del daño y trata como igual a las partes, solo ve si uno cometió
injusticia y otro la recibió; en este caso, podemos hacer un símil, como se
sabe, en la justicia distributiva se establecen dos extremos (más y menos) y un
medio justo, en la justicia correctiva, tenemos como extremos al provecho (más)
y a la pérdida (menos) con un justo
correctivo como medio. Más de lo bueno y menos de lo malo es el provecho, y de
manera contraria será la pérdida.
Cuando
entre los hombres existen disputas, recurren al juez, es decir, recurren a la
justicia. El juez por tanto es al justicia animada, es un medio entre ellos
“mediador”- por tanto cuando alcanzan el medio alcanzan la justicia- y tiene como tarea principal en primer
momento restaurar la igualdad, cuando el todo ha sido dividido en dos mitades
iguales, se dice que cada uno tiene lo suyo. Lo justo indica la división en dos
mitades (dikaion) y es preciso quitar al que tiene más y añadirle al que tiene
menos; el provecho provendrá del que tiene más de lo que era antes era
suyo, y la pérdida el que tiene menos de
lo que tenía al principio. Cuando NO se obtiene ni más ni menos, sino que las
partes tienen lo que en un principio por sí mismas, se dice que cada tiene lo
suyo, y no hay pérdida ni provecho. Lo justo aquí pues será, el medio entre
cierto provecho y cierta pérdida en transacciones no voluntarias.
De
lo justo político- dice Aristóteles- una parte es natural y otra legal. Lo natural
lo define como lo que en todas partes tiene la misma fuerza y no depende de
nuestra aprobación o desaprobación, por otro lado, lo legal es lo que en un
principio resulta indiferente, pero que una vez constituidas las leyes deja de
serlo. Lo que es por naturaleza está sujeto a cambio, lo cual no impide que
ciertas cosas sean por naturaleza y otras no lo sean. De las cosas susceptibles
de ser de otro modo, será por disposición de ley por convención, decidir cuales
son por naturaleza y cuales no. Las cosas que son justas por convención y por
conveniencia son semejantes a las medidas, y las cosas que no son naturales,
sino por disposición humana, no son las mismas en todas partes.
La
diferencia entre la acción injusta y lo injusto, así como entre la acción justa
y lo justo, radica en que lo injusto lo es por naturaleza o disposición de la
ley y esto mismo cuando se ejecuta, es por tanto una acción injusta, pero antes
de ejecutarse ésta, no lo es aún, sino solo algo injusto. Lo mismo para el caso
de lo justo y la acción justa. Se comete injustica o se obra justamente cuando
alguno ejecuta esos actos voluntariamente, es decir, cuando se procede
involuntariamente, ni comete injusticia ni obra justamente sino por accidente,
porque aconteció ser justo o injusto lo que hacía. Si un acto es o de
injusticia o justica, se determina por su carácter voluntario o involuntario;
si es voluntario se le censura, y es al mismo tiempo un acto de injusticia sin
ser aún un acto de injusticia si no se
le añade el ser voluntario. Asimismo los actos voluntarios pueden ser por
elección o sin elección, siendo los primeros los que han sido objeto de una
deliberación previa, y los segundos los hechos sin previa deliberación.
Existen
pues tres especies de daños en las relaciones sociales, primeramente los
causados por la ignorancia, pues son errores que se causan cuando se obra sin
darse cuenta ni de la persona afectada, ni del acto, ni del instrumento, ni del
fin. Como segundo punto, cuando los daños se producen contrariamente a una razonable
previsión, es una desgracia; cuando n contrariamente a una razonable previsión,
pero sin maldad, es un error culpable. Hay error culpable cuando el principio
de ignorancia está en le agente, y hay desgracia cuando está fuera de él.
Cuando se obra conscientemente pero sin previa deliberación, se comete un acto
injusto, como todo lo que se hace por cólera o por otras pasiones en los
hombres naturales o necesarias; y quienes por tales motivos perjudican y son
responsables de tales errores, obran injustamente y los actos resultantes son
injustos; sin embargo, quienes los hacen no son por ello injustos ni malvados,
porque el daño no procede con maldad, pero cuando se obra por elección
deliberada, se es injusto y malvado, dice Aristóteles.
No
es posible que se cometa injusticia consigo mismo, la acción injusta no
manifiesta la maldad en general, resultaría que estaría en poder del mismo
individuo quitarse y adjudicarse simultáneamente la misma cosa; lo cual e
imposible, puesto que lo justo y lo injusto de necesidad han de darse siempre
entre varios. Pero el que se daña a sí mismo, padece y hace simultáneamente las
mismas cosas, además si un hombre pudiese ser injusto consigo mismo, sucedería
que voluntariamente sufriría injusticia.
Aristóteles
sin duda alguna es reconocido como uno de los mejores filósofos de la historia,
sus estudios y análisis nos han dejado como legado la comprensión de muchos
fenómenos tanto del hombre como de la naturaleza. La Ética Nicomaquea no puede
ser la excepción, y me remonto especialmente al libro quinto “De la justicia”.
Hablar de la justicia puede parecer algo de lo que entendamos cotidianamente y
de lo que en el mundo se lucha y vive día con día, pero en pocas ocasiones nos
ponemos a analizar lo que verdaderamente implica la justicia. Aristóteles es
precisamente lo que nos muestra en este apartado, da un detallado importante de
los elementos conformantes de la justicia, aporta cuestiones para reflexionar,
en esencia sobre la aplicación concreta a los casos y cuándo considerar justo o
injusto una acción, bajo qué criterios debemos analizar las situaciones y de
qué manera realizar una correcta clasificación de los actos humanos respecto de
la igualdad o de la legalidad según sea el caso.
Un
obra que a mi parecer es fundamental para los juristas, los estudiosos del
derecho, para los abogados y quienes imparten justicia sobre todo, o en su
defecto para quienes legislan, que a mi parecer esta reflexión sobre la
justicia, ayuda en gran medida a comprender la naturaleza de los hechos y de
los actos humanos, para así poder generar un correcto análisis y juicio, y más
tarde aplicar la medida necesaria ya sea en una justicia distributiva o en una
correctiva, como bien apunta Aristóteles.
2. CONCLUSIÓN EN CUESTIÓN
Es
necesario conocer la naturaleza de las implicaciones y elementos que conforman
a la justicia, saber los extremos de los cuales se genera y sobre qué bases son
sustentados los actos del hombre para poder ser considerados justos o injustos,
de qué manera o en qué sentido lo son, y si en realidad resultan de la voluntad
o de un error. Todo lo anterior, es necesario para la eficiencia del análisis
al caso concreto y sobre todo me parece
importante para la legislación, pues es de estos elementos precisamente de
donde se crean las leyes, sanciones, los reglamentos, etc.; de la misma manera
para la impartición de justicia, en el sentido en que la Corte debe de tomar en
cuenta todos los elementos del acto humano para considerarse un acto justo o
injusto, pues es ella (la Corte) quien muestra los criterios de interpretación
de la ley, y el sentido en qué ésta debe ser aplicada, esto para la eficiencia
y correcta aplicación, pero sobretodo de la correcta impartición de justicia,
buscar ese medio justo entre los extremos del que nos hablaba Aristóteles.
Vicente Flores.
Vicente Flores.
lunes, 21 de octubre de 2013
SICARIO: AUTOBIOGRAFÍA DE UN ASESINO A SUELDO - MOLLY MOLLOY Y CHARLES BOWDEN
La inseguridad en nuestro país es un tema con el que vivimos desgraciadamente a diario, nos es tan común leer en los periódicos, o escuchar en las noticias al prender el televisor o la radio, sobre secuestros, robos, asaltos, violaciones, homicidios, etc., es algo con lo que hemos aprendido a convivir, algo que desde hace años aqueja no solo a la sociedad mexicana sino al mundo entero, aunque claro está que en algunos países es menor la estadística.
Pero sin duda alguna, algo de lo
que no puede prescindir México en la actualidad es su “gran esfuerzo” por estar
en los primeros lugares de las listas más populares de entre la delincuencia
organizada, el tráfico de drogas y los asesinatos al por mayor; esto es el
punto álgido de esta obra, y no precisamente del análisis de la delincuencia
organizada y el tráfico de drogas desde un punto de vista externo sino desde su
interior, desde su propia organización y funcionalidad, sus procesos de
selección y adiestramiento, el reclutamiento y los políticos involucrados.
SICARIO es una palabra fuerte de
pronunciar, implica terror y violencia, armas y homicidios, drogas y su
distribución; todo eso y mucho más es lo que implica ser un asesino a sueldo,
siempre pensando en el daño que nos pueden causar, o que en su conjunto hacen a
este país, pero es cierto también que pocas veces nos ponemos a pensar en qué
es realmente un sicario desde dentro, desde esa persona quien juega un papel
dentro de la organización o cartel, ¿Qué es de él? ¿Cómo piensa? ¿Qué siente?
¿Le teme a algo o a alguien? Estas son preguntas verdaderamente interesantes de
contestar, pero quien mejor que alguien que tiene este “trabajo” para
contestarlas, saber desde una fuente fidedigna la información real y concreta
de cómo realmente se maneja y se vive dentro de un cartel.
El Sicario, quien es el
protagonista de esta obra, nos relata en un primer momento la forma de operar,
es decir, como se llega a ser sicario, que pruebas se deben pasar, quienes los
entrenan, etc; como primer punto se llega a ser sicario desde que te brindan el
mínimo de confianza para estar en sus círculos de trabajo, eres seleccionado y
adiestrado, las pruebas son difíciles para entrar, pasar semanas enteras
realizando actividades recluido en alguna casa de seguridad del centenar que
tienen bajo su mando, con la ausencia de tu familia, pero siempre pensando en
que será lo mejor porque las grandes cantidades de dinero a ganar son quizá tan
inimaginables y con tanta “facilidad” como jamás en tu vida hayas imaginado. El dinero y el poder son la principal razón por la que
alguien accede a entrar a la delincuencia organizada, se necesita valor y
grandes “pantalones” para atreverte a matar a alguien por dinero, secuestrarlo
o torturarlo en su defecto; el trabajo sobre algún asesinato o secuestro conlleva
de una precisa planeación, casi perfecta o perfecta, sin errores o el que terminará
muerto será el sicario mismo.
El personaje principal nos relata
de una manera vivencial las horribles torturas que practican, los métodos de
sometimiento de las víctimas y el modo de operar en cada jerarquía, distingue
perfecto de entre las tareas del sicario, ya sea que se dedique a matar,
secuestrar, traficar, torturar, etc., cada uno tiene un rol específico y debe
respetar. El dinero del “Jefe” es sagrado para quienes pretenden no pagar lo
que debe, y resultan también víctimas de su propio equipo, nadie traiciona al “jefe”
y quien lo hace lo paga con su vida. La familia de todos aquellos involucrados
en este ambiente tan hostil pero tan abundante sin duda, resultan muchas veces
ser parte de la misma organización, y no por participar activamente, sino
porque se vuelven garantía de pago o de ajustes de cuentas. La vida es quizá lo
más atesorado en este ambiente, vives en todo momento sujeto a un arma y tras
el efecto de las sustancias que tú mismo traficas.
Se desenmascara asimismo, al
gobierno, la policía y los militares, quienes pasaron de ser el blanco de
ataque, a parte de la organización o cartel, nos muestra ejemplos de políticos que
llegaron al gobierno de una entidad federativa o de un municipio, tras ser
pactados con el mismo narco, tras ser financiados por ellos mismos; se muestra
una policía corrompida desde sus más bajas jerarquías, donde el Estado mismo es
quien los adiestra para incorporarse más tarde a algún grupo de acción de los
cárteles, “los jefes” proporcionan sus incentivos monetarios a los cadetes del “honorable”
cuerpo de policías, quienes reciben su “narcobeca” desde que son estudiantes,
más del 40% de los policías que entran a la academia, se enlistan en algún
cartel, y esto es apoyado firmemente por las autoridades, pues son ellas mismas
quienes forman parte del narcotráfico.
La CIA y la DEA resultan ser elementos de capacitación para los mismos
sicarios, es inimaginable que los propios organismos de acción antidroga del país
“más poderoso” del mundo sean corrompidas
por grandes capos mexicanos, irónico resulta el hecho de que la DEA (Drug Enforcement Administration en sus
siglas en inglés; en español: Administración de Cumplimiento de Leyes sobre las
Drogas) sea actor contra el tráfico de drogas y a su vez coadyuve a la
misma tarea. ¿En quién confiar ahora si nuestras mismas autoridades son parte
de la delincuencia organizada? ¿Los ciudadanos que podemos esperar ahora sin la
protección y seguridad pública?
El mismo presidente de la república muchas veces ignora
que muchos de sus secretarios de estado (en el caso de Felipe Calderón como lo
menciona el personaje principal) sean brazo derecho de los capos mexicanos,
sean los medios a disposición para que todo el movimiento de la droga sea lo
más fácil posible, de ahí viene el famoso accidente donde murieron el entonces
secretario de gobernación Juan Camilo Mouriño y José Luis Santiago Vasconcelos
en ese momento titular de la
Subprocuraduría de Investigación Especializada en Delincuencia Organizada.
Sin duda fue un hecho que conmocionó a la clase política del país y a la
sociedad en general, y cuál fue la sorpresa, que fue como ya era esperado y
sabido por muchos un “narcosabotaje”, Vasconcelos resultaba ser un político incomodo
tanto para el narco como para el mismo gobierno involucrado, pues como dicen “donde
ponía el ojo ponía la bala”, él investigaba un asunto hasta sus últimas
consecuencias, en múltiples ocasiones sacó
a la luz información que resultaba de sus investigaciones arduas, resultó
responsable de la aparición de muchas narcofosas y de algunos narcotúneles en
el norte del país.
Creo que a estas alturas, en nuestros días, la sociedad
mexicana ya no se sorprende de en lo que ahora se ha convertido la política en
México, de una “narcopolítica”. El Estado ahora se volvió parte de una
organización de narcotráfico, que subyace bajo una falsa opresión que en
realidad es una substanciación y sostén de la mafia mexicana.
Múltiples son los detalles que te adentran en la lectura de
este libro, que nos deja una lección de vida donde un sicario pasó de ser un
asesino a sueldo a un soldado de Dios, donde el arrepentimiento se hizo
presente en él, sabiendo que por ahora está vivo con su familia a quienes pudo
salvar de las balas del cartel, pero que tampoco descarta su pronta muerte,
pues él sabe que la muerte es algo con lo que vivió siempre, solo que ahora no
será su acompañante sino su verdugo.
Te invito a leer este relato que sin duda alguna como mexicanos tenemos que leer, ¿Por qué? Porque es una realidad con la que vivimos, misma que debemos afrontar, porque ninguno de nosotros está exento de ser víctima directa de este ambiente, porque víctimas ya somos toda la sociedad, ¿Qué podemos esperar ahora de nuestro gobierno? ¿Hemos llegado ya al límite de la sinvergüenza y el descaro de nuestras autoridades?
Vicente Flores.
Vicente Flores.
jueves, 17 de octubre de 2013
“NO MATARÁS –K. KIESLOWSKI
El
hombre desde siempre, ha sido objeto de la influencia vanagloriada de la fe y
de la divinidad que lo acompaña en su andar según las creencias que profesen
cada uno de los individuos que se enmarcan per se en el contexto divino o
religioso. Este marco del que hablo, se define si bien por mitologías en
algunos casos, por hechos reales en otros; no deja de tener una base firme que conduce al hombre a actuar
de tal o cual manera según los preceptos que establece como “buenos” o
“ideales”, según los cuales el hombre debe ser, actuar y quizá hasta sentir.
Tal es el caso de la corriente judeocristiana, que se basa en preceptos básicos
llamados “Decálogo”, dados por Dios a Moisés y éste a su vez al pueblo; dando a
entender que eran las estipulaciones por las cuales el Dios en que todos ellos
creían era lo que pedía de ellos.
El
filme “No Matarás”, es quizá sino una representación concreta de lo que
mencioné en líneas anteriores, si bien puede ser una representación ad hoc al tema mismo, es decir,
vislumbramos en las escenas cuestiones por las cuales podemos preguntarnos,
reflexionar o quizá en un momento dado hasta juzgar el porqué de una regla o
mandato, porqué según la tradición hebrea fue dado por Dios, y hacia dónde se
dirige la cuestión del 5to mandamiento del Decálogo o el porqué de este
precepto.
La
cuestión divina en este momento no nos compete pues no soy una persona
especializada en ello, aunque mi culto religioso me lo permita. Vayamos más
allá de presenciar, saber, o cometer un asesinato, aboquémonos a preguntarnos
si nosotros tenemos la facultad de privar del derecho de la vida a alguien más,
incluso a un animal como se muestra en la película, quizá de primera instancia
todos, o al menos la mayoría contestaría que nadie es dueño de la vida del otro
y por tanto no podemos decidir sobre él o ella ni sobre su destino. Pero me
pregunto ¿Por qué si no somos o no tenemos el derecho de quitar la vida a
alguien más lo hacemos? ¿Es quizá algo nato en el hombre? Son cuestionamientos
que nos podrá llevar tiempo en contestar, pero en la reflexión no emite de
inmediato a lo que estamos predispuestos moral y religiosamente, pues el
asesinato no es bien visto ante ninguna divinidad, al menos en la mayor parte
de los cultos religiosos. Es pensar en que nuestra libertad de hacer y deshacer
se ve limitada solo por la libertad del otro, es decir, nuestra libertad tiene
límites hasta donde la del otro comienza y le afecte nuestra acción.
¿Qué
debo pensar de aquel hombre que priva de la vida a otro? O ¿Qué es lo que puedo
suponer que piensa o siente alguien momentos después de haber cometido el acto?
Es en verdad un análisis nada fácil, pues no todos somos asesinos y por tanto
nos es difícil tener empatía con esos pensamientos; el vacio que una persona
pueda sentir, su necesidad de algo o hacia alguien, su desesperación o coraje,
son causantes de tal atrocidad, pensar tan siquiera que en nosotros pueda
crearse un monstruo social, a través de la presión, del vacío, del
inconformismo o cuales quieran que puedan ser las razones por las que alguien
prive de la vida a otro. La crueldad, frialdad y brutalidad de un asesinato
repulsivo es de la manera en que el hombre “civilizado” muestra que sigue
siendo “animal”, que esa condición jamás podrá perderse, ya que es quizá la
acción más común en la historia del hombre, a través de batallas, guerras,
asesinatos u homicidios; algo natural podríamos decir, pero sin conciencia ni
reflexión de por qué lo hacemos o de si nos corresponde hacerlo, pues que no
todos ante la naturaleza somos libres y por tanto nadie es mayormente mejor o
peor ante el otro? Entonces, por qué adjudicarnos ese derecho sobre el otro a
través de la libertad que poseemos? Interrogantes
que no nos habíamos hecho tal vez, pero hemos de recordar que en la conciencia
se lleva el acto y la penitencia más cruel es recordar a diario en lo que te
has convertido después de matar. Porque después de matar no serás el mismo de
antes, un monstruo social te has de convertir.
El
difícil trabajo de un abogado siempre se torna en cualquier situación que a
éste le compete en su capacidad litigante, pues su deber es defender los
intereses de su cliente, conociendo previamente la situación y habiendo
aceptado los términos en que esta se encuentra, tal y como es el caso de Piotr,
quien era un estudiante de abogacía en una etapa clave de sus estudios, pues
estaba por concluir sus estudios y se preparaba para hacer su examen de
titulación y quien tiene la difícil tarea de defender a Jacek (protagonista del
filme quien asesina a un taxista brutalmente) ante los tribunales que lo
sentenciarían por el acto cometido. La sentencia en sí misma tiene el fin de
castigar y hacer pagar al infractor por el hecho o acto que se le adjudica,
pero por sí misma tiene un fin más profundo la sentencia, y es el de hacer
“reflexionar” a dicho infractor acerca de su actuar y por tanto ayudarlo a reintegrarse
a la sociedad de la que alguna vez formó parte con derechos y deberes. Pero me
pregunto si el fin último de la sentencia es el que anteriormente mencioné, por
qué dar la pena de muerte a alguien?, si
la reflexión en él no tendría lugar pues morirá sin tan siquiera percibir por
completo el hecho. Esta es una de las cuestiones que más controversia pueda
causar con respecto a este tópico, pues es como aplicar la Ley del Talión ¿ojo
por ojo, diente por diente y …vida por vida?
Es quizá algo no podamos comprender pues en nosotros caben acciones y
pensamientos que ni nosotros mismos podemos entender.
Finalmente,
nos queda la reflexión de sobre si tenemos o no el derecho sobre el destino y
vida de alguien, creo yo que este filme es una excelente apreciación sobre la
vida y la muerte, y más sobre la conciencia de saber hasta qué punto somos
capaces de llegar con nuestra propia libertad, la respuesta ya estará en cada
uno de nosotros, independientemente del culto religioso que profesemos, la vida
es sin duda un regalo maravilloso que se nos otorga, así que cada uno tenemos
derecho a ella a pesar de nuestras acciones.
lunes, 7 de octubre de 2013
“La Naranja Mecánica” Stanley Kubrick -
Stanley Kubrick fue uno
de los más grandes genios que haya dado el mundo al llamado séptimo arte, y
cuya influencia dejó marcado al siglo XX a través de grandiosas obras fílmicas,
entre ellas “A clockwork orange” o en su título en español “La Naranja Mecánica”, cuya fama fue
adquirida por la gran controversia que causó en el Reino Unido en los años 70 entre
críticos del cine y diversos medios de comunicación sobre su contenido y la
conmoción de los espectadores.
La historia de Alex
(protagonista de la cinta) es sin duda un personaje singular frente a la
psicología de otros personajes de la misma categoría o contexto en filmes
distintos. La particularidad de Alex es en sí misma la ultra-violencia, que muestra el claro alarde al daño ajeno y de
lo cual él y su grupo disfrutaban que sin planearlo tan estratégicamente conjuntaban
coactivamente hacia el o los individuos, y que de un lugar a otro iban en busca
de la satisfacción de dicha filia; como segunda instancia tiene la tendencia y
gusto por la violación como ese afán de
ver el sufrimiento de la victima frente al acto sexual al que él procedía y del
cual él era el principal participe dentro del grupo como todo líder. Desde las
primeras escenas de la película se muestra la rebeldía por parte de aquel inadaptado
grupo de adolescentes, los cuales irrumpen toda norma social y moral que en la
sociedad pudiera existir, dejando por doquier huella de la malicia que en ellos
se plasmaba y del cual sembraban cierto terror en las personas de tanto quienes
presenciaban los ataques como quienes eran receptores de los mismos. “Como a toda
acción corresponde una reacción” mencionaría el ilustre Newton en su tercera
Ley, los actos operados por el protagonista finalmente tendrían el merecido correspondiente
tal y como la ley es en esencia coercitiva, después de sufrir la traición de su
grupo en un acto delictivo en el que era participe como muchos otros, estos lo
dejaron a su suerte dentro de la casa habitación donde yacían delinquiendo, el
cuerpo policiaco llegó y fue arrestado como en ocasiones pasadas de las que
había ya librado, pero que desgraciadamente en ésta no sería así, pues su vida sufriría un cambio
drástico para bien aunque en un acto coactivo por parte de la justicia a quien
había falseado en anteriores ocasiones.
El camino que pasó
Alex durante su proceso de “reinsertación a la vida social” tuvo dificultades
que él mismo jamás concibió, pues el tratamiento que obtuvo no fue nada fácil,
se trata del tratamiento “Ludovico”, el
cual muestra una clara eficacia en el cual el paciente se ve impedido a
realizar un acto violento. Dicho tratamiento es irónico en cierto aspecto, pues
utiliza la violencia misma aunque en imágenes, y las drogas, que bajo ese
efecto el paciente se ve obligado a mirar dichas imágenes y provocar después de
todo un repudio a la violencia, es decir, le causa un tipo de intolerancia a la
misma. Un elemento importante de la historia es la inconfundible y grandiosa
Novena Sinfonía de L. van Beethoven, la cual mostró gran conmoción y gusto al
escuchar la interpretación de la Oda a la Alegría en voz de una dama en el bar
lácteo Korova, quedó quizá tocado por dicha obra con la majestuosidad de los
coros y timbrantes sonidos que a diario disfrutaba escuchar una y otra vez.
Esta pieza así como le causó un tremendo gusto al oírla, de igual manera sería
su tortura en dicha cura, pues estas
imágenes eran acompañadas por música clásica y después del tratamiento al tener
contacto con esto le provoca un gran malestar, por lo que realizar el bien era
la única salida que tenía.
El filme nos muestra
claramente este llamado “control de la conducta”, del que se desprende el acto
humano de discernir entre una acción u otra concibiendo la naturaleza del
mismo, es decir, poder decidir entre un acto de bien o un acto de mal, que es a
lo que generalmente podríamos adjudicar como concepción del “libre albedrío del
hombre”.
Poder decidir entre el
bien y el mal es una de las características que tenemos como seres humanos, es
decir, es un acto puro del hombre el de tener la libertad de elegir qué hacer o
qué no hacer, que sin esta capacidad sinceramente no seríamos más que animales
en el más estricto sentido de la palabra, pues no tendríamos conciencia de
nuestros actos propios y por tanto no tendrían sentido dichas acciones. Es así
como trata de operar el tratamiento a Alex, condicionarlo a una u otra
concepción sobre su misma libertad, pues él perdería dicha capacidad
superponiendo una mayor seguridad y erradicación de todo acto vandálico al que
pudiera tener acceso.
Finalmente, condicionar
una conducta social tal y como hasta cierto punto lo hace el Derecho, deja al aire la argumentación de sobre si ¿el
libre albedrío es o no condicionado de igual forma?, a lo que quizá
respondiendo por otro lado podamos tener una concepción inmediata hacia esto,
pues el libre albedrío del hombre no es por tanto un acto que se pueda condicionar
en su totalidad, ya que a pesar de las
represalias que tenga el individuo siempre podrá tener acceso a la capacidad de
decidir sobre su actuar sean cuales sean las condiciones o circunstancias en el
que éste se encuentre, el Derecho lo único que hará dentro de sus principales
tareas será el regular dicha acción que del hombre surja como consecuencia de la
capacidad única que tiene de discernimiento, a través del sistema normativo y
de la coercibilidad que en su esencia mantiene aún en contra de la voluntad del
hombre.
Vicente Flores.
Vicente Flores.
martes, 24 de septiembre de 2013
Democracia- G. Sartori
La panorámica que se da en cuanto a la
democracia es sencilla, puesto que los pueblos antiguos tuvieron un proceso
degenerativo en este aspecto. Podemos citar a un gran filósofo, un gran padre
de la ciencia, las humanidades y cualquier materia en si misma del hombre puro,
Aristóteles, quien se encargo de clasificar a la democracia como una de las más
ruines formas de gobierno, a tal grado que la palabra misma fue considerada
negativa por aproximadamente 2000 años.
Hoy en día tenemos una concepción distinta,
ahora como refiere Sartori, es una abreviación que significa
Liberal-democracia. Existiendo así al conceptualización de la “democracia
igualitaria”, que no es más que la forma de gobierno reducida a un ideal
general, que en su progreso estima a una
mayor igualdad. La democracia es un principio de legitimidad la cual hace
referencia al poder, que es legítimo por
el simple hecho de que cada ciudadano tiene la libertad de ejercicio de poder
emitir un sufragio para elegir a sus representantes los cuales a su vez
proclaman y velan por el interés general del grupo que lo eligió, esto
significa que la democracia es representación pura de la voluntad popular.
Existen sin duda contraposiciones que a mi
juicio son extremas en cuestiones concretas y distantes en otras más con
respecto de la democracia, hago referencia al Marxismo, que tiende a bien
descalificar a la democracia de capitalista y burguesa, pero como señala
Sartori con respecto de este tema especifico, haciendo ver el error causal del
conflicto, pues critica de no llevar a cabo un papel adecuado en su territorio
y con su población, siendo una democracia- dice Sartori- del comunismo
realizado.
La democracia es un sistema político
llamado a la resolución de problemas en el ejercicio del poder, donde la libertad política es la única llamada
para dicho asunto, es especifica y practica, pues es base y esencia de la
democracia, sin esta libertad, la democracia no tendría razón de ser,
contemplando que es una Libertad frente y no para el Estado. Sartori comenta en
su análisis, que la Libertad “para” es en grado menor frente a la autonomía, la
cual implica a decir verdad, una libertad mayor.
Definir democracia pareciera ser muy
sencillo, pues quizá tan solo un juego de vocablos que dan origen a una
palabra, pero contemplar todo lo que ese juego silábico significa, nos ha
llevado innumerables paginas, agotados autores y filósofos, que sin duda gran
labor la que desempeñaron en su tiempo, pero que ahora nos dejan con un mayor
número de interrogantes, algunas de ellas quizá no las imaginábamos antes de conocer
lo que verdaderamente es democracia, me atrevo a decir que hoy en día seguimos
sin saberlo.
Vicente Flores.
Vicente Flores.
martes, 10 de septiembre de 2013
“ENSAYO SOBRE LA CEGUERA- J. SARAMAGO”
La humanidad tiene creo yo un sinfín de temores, unos más catastróficos que otros, pero sin duda, uno de los más terribles que puede marcar para siempre la vida de una persona, tanto en su supervivencia como en su manera de sobrepasar los obstáculos que ante ellos se oponen, ya sean físicos o psicológicos, es una doble y maratónica tarea de cada día, enfrentarlos y lograr pasarlos, pues es una necesidad nata la que tiene el ser humano de conocer su entorno a través de todos los sentidos, y el hacerlo sin uno de ellos, es fatídico.
Saramago comienza relatando un escenario demasiado desgastante quizá para toda persona citadina, y hago referencia en especifico a la multitud de autos en una ciudad tan caótica, y en el preciso momento de un alto en el semáforo, el primer caso de una extraña enfermedad que más adelante seria toda un epidemia, hace acto de presencia en un hombre, al parecer de una buena posición socio-económica. Más tarde, esta enfermedad sigue su curso y se presenta en una y en otra persona, en las mismas circunstancias fisiológicas que las anteriores.
A través del curso del tiempo, como mencioné con anterioridad, el número de personas afectadas por este mal aumentaron, por tanto fue necesario crear un tipo de refugio para estos enfermos, pues se creía era contagioso. El instinto de mantenerse con vida del ser humano, va sin duda más allá de nuestras propias expectativas, pues el no contar con un sentido tan vital como es el de la vista, es sentir la muerte en todo momento, pues no sabes lo que pasa a tu alrededor, ni puedes observar los detalles de las situaciones que a tu alrededor se llevan a cabo.
El liderazgo no se podía hacer esperar en este lugar, pues la convivencia con las personas que presentan tu misma condición en tu entorno inmediato, se convierte ahora de una necesidad a un obstáculo, pues no podrás identificar como es ni cómo actúa, al menos no con la rapidez con la que podrías hacerlo teniendo la vista. Es así como surgen los grupos divididos dentro de este “refugio”, pero para poder llevar cabo dicha convivencia se tienen que tornar posiciones encontradas en cuanto a la organización de dichos grupos, he aquí donde el hombre político-social sale a la luz para adaptar las necesidades de su grupo frente a las de los demás. El líder fue elegido, en unos “democráticamente” y en otros por auto denominación se nombrar “monarcas” de su grupo. Es aquí cuandorecordamos que el hombre jamás dejara de ser político, pues hasta en las condiciones más precarias y adversas, la necesidad organizacional y de liderazgo se hace presente, como si esto quizá ya fuera un instintoab origine.
¿Pero porqué no abocar esta situación a un entorno más plausible, donde las consecuencias de dicha enfermedad no sean físicas sino sociales y psicológicas? Es precisamente este análisis que desde mi perspectiva Saramago hace en torno a la sociedad moderna y su constante actuar afectando la estabilidad propia del hombre y de su entorno. Esta ceguera podemos asociarla claramente a un discapacidad no física por supuesto, sino a una discapacidad social, a un malestar que aqueja a individuos y que pareciera ser una epidemia, pues el hombre en la actualidad ha ido perdiendo su propia visión como ser humano, y se ha ido agregando a una visión individualista y egoísta,que como dijera Tocqueville, “este sentimiento (individualismo) es legitimo en tanto no conduce al hombre y a los individuos a apartarse de la sociedad… en consecuencia es necesario que el individualismo no conduzca a su forma más terrible que es el egoísmo”.
Un final, que por una parte es claro, pero por otra te deja a la reflexión al leer la narración y la descripción del autor acerca de cómo se vislumbraba la ciudad en ese momento, la desolación en que se encuentra como consecuencia de los recientes acontecimientos. La esposa regresa a casa con cierto descontento, impaciencia y quizá incomprensión, al no poder contener en sí misma la ardua tarea de la que se hizo cargo, y más aún de la carga mismo que esto conllevaba. Comienza a dar lectura a una Biblia, mientras la lectura iba avanzando, pareciera ser que el remedio a tanta catástrofe había llegado con dicha acción por parte de ella, que de pronto uno y otro comenzaban a recuperar la vista. Sin duda esto último, aunque metafórico en cierto aspecto, se denota claramente el mensaje infundido por el autor sobre sus enunciados.
Analizando el contexto anterior, puedo inferir sin temor a equivocarme, que la ceguera por la que está pasando el hombre dentro de sus respectivas sociedades, y reitero no como una insuficiencia física sino como una discapacidad social, ha sido consecuencia de una falta de identidad quizá, de una gran presión social y de un egoísmo muy marcado en todos los aspectos, pues no somos capaces muchas veces de actuar sin un beneficio para nosotros mismos, pero a la luz de la verdad (en este caso Saramago hace referencia a la Biblia en su metáfora) de las buenas acciones, del bien social, y de la formación de identidad y valores humanos, todos ellos contenidos en alguna doctrina religiosa quizá, es el camino por el cual “se caerá la venda de los ojos” que no nos permite ver más allá de nuestra mundana realidad y de la cual nos privamos vivir en su maximización de múltiples beneficios tanto personales como colectivos.
martes, 27 de agosto de 2013
“El Proceso- F. Kafka”
Kafka sin lugar a duda fue y ha
sido uno de los más grandes escritores y literatos del siglo XX. Su obra ha
influenciado en gran medida a la literatura universal y a otros autores
contemporáneos de manera innegable y que ha causado gran revuelo entre los
críticos de la literatura, pues su obra ha sido muy polémica en cuanto al
sentido estricto en el que se dé una interpretación real en función de
distintas doctrinas que le critican. Un gran ejemplo es su obra “El Proceso”
que fue considerada por el mismo autor como una obra inconclusa.
El Proceso, una obra magnífica
en todo sentido, aborda diversas perspectivas de las cuales podemos partir para
un análisis de las situaciones que en la historia juegan un papel muy
importante puesto que envuelven al personaje principal (José K.) en una serie
de artilugios en contra de sí mismo y en juego está su libertad al ser acusado
de alguna pena que en principio desconoce y que seguirá desconociendo hasta
su inminente y fatal destino. En
principio, el primer punto versus su libertad es la falta de “humildad” que
tiene frente a la situación, es decir, se opone rotundamente y manifiesta, desde el
comienzo, su notorio rechazo al proceso por el cual estaba pasando desde que fue irrumpido en sus aposentos de manera repentina por sujetos que en su vida había
visto y que objetaban una pena que no le fue expuesta en ningún momento. Por
consiguiente el actuar de K. no fue el más adecuado, como normalmente lo es en una
persona que se encuentra en dicha situación, es decir, en calidad de acusado, ya que su actuar fue
agresivo desde el primero momento y no coadyuvo en principio con dicha
situación.
El carácter arbitrario de la
situación deja en claro que no es un aparato jurídico loable o mejor dicho no
es competente en el sentido estricto de llevar la situación de K. puesto que no
es legitimado su derecho a ser informado sobre la imputación que se le alude y
de igual manera solo es obligado a ir a “declarar” y por tanto la violación a
sus “garantías individuales y/o derechos humanos” fue sin ni más un paso que se
dio en el proceso mismo en el que se le privó sin importar tan siquiera las palabras de K. en
defensa propia- lejos de conocer su
imputación- frente a la autoridad, quienes no lo juzgaron ni procesaron como
normalmente debería de haber sido, y que por tanto no existía motivo alguno
para su distinto proceso judicial.
La manera en que se llevó el
proceso en contra de K. muestra una clara y real idea de cómo funciona el
ciudadano frente al aparto burocrático y al Estado mismo, refleja la
ignorancia del individuo frente a las situaciones legales, y cómo actuar ante
ellas, puesto que muchas veces la intimidación
sirve como medio para sustraer la libertad de quien es procesado y de la
misma manera es violentada la integridad del individuo en tanto que se hace
presente el abuso de autoridad en todos los aspectos, la impartición de
justicia se hace presente ni tan siquiera en el más mínimo detalle, he ahí
donde las lagunas comienzan a hacerse visibles dentro del ámbito jurídico, pues
son éstas las que se suman a la falta de congruencia en algunas leyes y por la
cual la jurisprudencia no se lleva a cabo de manera más competente en los
distintos casos establecidos.
Es de conocimiento general, o
al menos debería ser así, que ningún individuo sea cual sea el interés o
culpabilidad imputada, puede ser condenado sin previo juicio para un análisis
de la situación en la que se vea inmerso dicho “presunto culpable” y que se
demuestre verdaderamente el acto imputado y por el cual se le ha privado de la libertad.
K. desgraciadamente no corrió con la misma suerte pues fue condenado a ser
azotado, que sin una alusión al hecho del porque se tomó esa decisión, tan solo
fue acatada por los agentes correspondientes y actuaron de manera visceral ante
tal cuestión, pues el final era inminente y de ninguna manera aplazable pues el
martirio de K. terminaría por fin aunque no en los mejores términos como
hubiésemos deseado, fue privado de la vida de una manera cruel podemos decir,
pues no fue en si la condena a la que fue dictaminado pero fue la suerte con la
que corrió.
En conclusión, la obra de Kafka
ha sido precursora de múltiples avances en cuestión jurídica y sobretodo de la
materia penalista, ha sido forjador de criterios y análisis concretos de dicha
materia; así mismo nos da pauta a la reflexión y análisis propio de nuestro
sistema jurídico mexicano, de cómo actuamos frente a éste y como deberían de
ser apreciadas las leyes para su mejor jurisprudencia y aplicación a la
ciudadanía, que tiene como derecho conocer en su totalidad la funcionalidad de
dicho sistema y como deberá actuar ante una situación determinada.
jueves, 15 de agosto de 2013
“El Señor de las Moscas” de William Golding
El hombre ha sido desde la antigüedad un ser que necesita sin duda alguna vivir en
sociedad, pues por sí mismo le sería difícil sobrevivir mucho tiempo, ya que en
sus primeros años no es apto por sus propios medios de subsistir. A través del
tiempo, se ha hecho mucho más compleja la manera en como los hombres dentro de
sus agrupaciones van tomando orden, consciencia y poder, los cuales son
necesarios para mantener la estabilidad
de sus mismos grupos. “El Señor de las Moscas”, es una historia que me cautivó
ya hace algunos años al leerla y que ahora a través del tiempo y del estudio,
puedo comprender la dimensión de dicha historia y del análisis tan profundo que
se puede realizar en torno ella desde distintos puntos de vista.
Esta historia nos muestra claramente la necesidad de un
“hombre social”, es decir, de un hombre que pese a circunstancias adversas en
su entorno, mantiene la necesidad de convivencia, orden, de fuerza y
supervivencia. Para poder lograr el control del grupo en la historia, se basan
sobre un artículo encontrado por uno de los protagonistas (Piggy) y se trata de
un caracol, que si bien es cierto, para la cultura mesoamericana es un símbolo
muy preciado y un objeto que se le dio un importante uso en la época
precolombina, tan importante que era utilizado en todo momento, pues su función
era la de comunicar o anunciar, era el llamado de las masas; así mismo se
prestó a la función para el grupo de infantes los cuales tomaban turno de
opinión y respondían al llamado del caracol, a partir de este momento comienza
a reflejarse otro punto muy importante distintivo del hombre, que es la
imposición de una “regla”, la cual sería en todo momento acatada por el grupo a
la que fue destinada y por la cual comenzará una nueva etapa a la que se une el
orden y la organización, pues dicha regla se concreta en quien tenga el caracol
tendrá el derecho de opinar frente al grupo, y lo cual da pauta también a la
posesión del liderazgo del grupo por parte del “más fuerte”.
El poder ciertamente es una de las cuestiones más
anheladas por el hombre, pues en esto engloba el control sobre las masas, la
disposición de la riqueza y la decisión sobre todo lo que en su poder se
encuentra reunido, tal y como nos los señalan Rousseau y Maquiavelo en sus
obras alusivas a este tema. El poder es cedido por votos en “aparente
democracia”, que quizá no podamos usar tal cual este adjetivo al acto de
elección por parte del grupo hacia con Ralph para obtener el liderazgo en un
principio, pues hablar de democracia implicaría mayor detalle, situaciones y
circunstancias que concebirían la misma
como tal, pero quizá podamos dejarlo como “aparente” pues se puede poner en
comparación al hecho mismo de efectuar el
sufragio por quien quieres que sea tu líder. A partir de que el poder es
cedido, lo primero y más necesario para mantener como ya habíamos mencionado,
la estabilidad dentro del grupo, será la imposición de reglas para la mejor
convivencia, y es eso mismo lo que Ralph en un momento dado hace con sus ahora
“seguidores”. Comienza el tiempo de la construcción de un campamento, que
podamos comparar la acción a la de edificación de un imperio que estaría
constituido por palacios, centros ceremoniales, etc. Da incio para el grupo de
Ralph un momento lleno de características especiales con las cuales empezó de
igual manera la civilización del hombre y el mejoramiento de sus condiciones se
supervivencia, pues el fuego se hizo presente como un elemento indispensable
para el ser humano, pues de ello depende mucho la vida, en consecuencia
necesitará de alimento y este le será dado por una de las primeras actividades
que realizó el hombre primitivo en grupo que fue la cacería, por medio de
herramientas construidas por ellos mismos, y que en un paso anterior tendrán
que manipular perfectamente para sobrevivir y para luchar, pues las fricciones
entre el grupo comenzaban y las divisiones se hacían cada día más marcadas entre quienes estaban
con uno y con otro líder. Lo anterior también ha sido parte innegable de la
naturaleza humana, que es la lucha por el poder, pues innumerables pueblos
fueron divididos y en la actualidad lo son a consecuencia de la confrontación
de ideales y malestares comunes.
Por otro lado
tenemos un personaje muy singular, del cual ya habíamos hablado en anteriores
líneas, se trata de Piggy, de quien podamos hacer reflexión sobre su papel
desempeñado dentro de la trama y que hago alusión a que funcionó como una
especie de consejero, una “auctoritas” como era conocido el poder del Senado en
la Antigua Roma, pues eran los prudentes quienes aconsejaban al rey acerca de
sus decisiones, y es eso mismo lo que Piggy realizaba para con Ralph. Su
desafortunada muerte causó un conflicto enorme dentro de quien recibía sus
consejos – Ralph-y por quien algunas veces era guiado, Piggy pereció en su
lucha por la conciliación y la
prudencia.
El acto criminal siempre ha sido parte también de la
historia del hombre, y que verdaderamente ha causado conflictos enormes su
presencia en distintas circunstancias y épocas, la manera de ser castigado un
criminal dependerá de la sanción que coloque alguna ley expedida por el o los
líderes acorde con el acto cometido, pues se debe castigar la mala conducta de
algún miembro del grupo que afecta directa o indirectamente la armonía que en él
se genera; esto mismo fue lo sucedido en dicha historia, donde aparece el acto
de tortura con azotes públicos, como se solía realizar en algunos pueblos de
las civilizaciones antiguas y modernas de igual manera. Es un acto de barbarie
sin duda, pero el cual fue fructífero realizar durante siglos para enmendar la
conducta de un miembro mal intencionado y que en cierta medida hoy aplicamos.
Habiendo analizado los rasgos característicos de la obra
“El Señor de las Moscas”, desde un punto de vista histórico, sociológico quizá
y antropológico en cierto sentido, nos damos cuenta que dicha historia contiene
los matices necesarios para el análisis de una micro sociedad, de cómo el
hombre es por naturaleza social, y de cómo quizá en algún momento comenzaron
las primeras sociedades a partir de los rasgos humanos y animales que generamos
en contacto con otro de nuestra misma especie; de cómo el hombre se vuelve
“hombre” sin dejar de lado el sentido propiamente animal.
Vicente Flores.
Vicente Flores.
lunes, 29 de julio de 2013
“Los Olvidados” -Luis Buñuel
Durante la historia moderna del hombre, es decir,
desde hace ya algunos siglos, en todo el mundo la división de clases ha sido
marcada tajantemente por el sistema económico al que tengan acceso todos y cada
uno de los miembros de una sociedad, y como se ha visto hasta ahora los que
mejores oportunidades y posibilidades económicas tienen son los menos, esto se
traduce en que el grueso de la población pertenece a una clase más baja, y qué
decir de aquellos que viven la miseria misma, este panorama exactamente es el
que nos presenta Luis Buñuel en su filme “Los Olvidados”, enfocando su atención
y análisis total a esta última clase de la que he hecho mención: los de la
clase baja.
Comenzaré así pues, con un pequeño fragmento que se
menciona en el inicio de la película “[…] las ciudades modernas esconden bajo
sus magníficos edificios, niños mal nutridos, sin higiene, sin escuela, semillero
de futuros delincuentes […]” sin duda, estas palabras subyacen bajo un cúmulo
de situaciones de la cruda realidad, como bien decían al comienzo, México no es
excepción de esta realidad que en muchos países ricos y pobres existe, pues la
clase baja es y será la más vulnerable a todos los males que aquejan a una
sociedad. El delinquir es una situación o acción mejor dicho, que ha
proliferado siempre en la clase baja, aunque justificada en cierto modo, pero
no aplaudida ni solapada, ya que la necesidad que existe de cubrir los
menesteres básicos de todo individuo, entre lo que destaca el alimento,
elemento por el cual las disputas y riñas son paradójicamente “el pan de cada
día”, pues en ocasiones nos muestra la película como es que tratan de conseguir
satisfacer dichas necesidades. El vandalismo ha sido siempre una salida fácil
para conseguir ciertas cuestiones, pues es mejor y más sencillo robar que
trabajar para ganarlo.
Un elemento primordial influyente en este tipo de
acciones sobre los jóvenes de la clase baja, es la falta de una figura que los
guie y peor aún la desintegración familiar que se vive, y de la cual es muy común
en dicho estrato, aunque cabe aclarar que no es especifico de la una clase los
problemas de este tipo, sin embargo si son más propicias a darse en un estrato
más bajo cabe mencionar por la dificultad de satisfacción parcial o total de dichas
necesidades. Este elemento mencionado en principio, creo yo va de la mano con
la educación, pues aunque la educación no es garantía de cero vandalismo, es
cierto que es una guía o camino por el cual los jóvenes se pueden mantener alejados
de vicios y malos actos que perjudiquen su libertad. Como se vio en el filme,
la autoridad no siempre es opresora en el sentido en que su fuerza la ejerza sobre
el que delinquió para que pague por el delito cometido, sino se mostró un claro
ejemplo de cómo a través de la oportunidad de la educación el Estado puede ser
corrector en cierta medida a las acciones mediocres y negativas del individuo,
tal es el caso de uno de los personajes, que por falta de atención de su madre,
sin acceso a la educación y el medio en el que se desenvolvía propició a las
malas conductas, y que se le dio la oportunidad después de un supuesto robo,
acceder (aunque por la fuerza) a aprender un oficio, ofreciendo de tal manera
el lleno total de los menesteres básicos como ropa, alimento, techo, etc.,
aunque si bien es cierto que no en las mejores condiciones, sí en la cobertura de
tales. Otro de los elementos que me llamó la atención fue como marcó un acto de
violencia la vida de dicho personaje, en el que daría pauta al inicio de su reformación
a partir de su participación como espectador y cómplice de la muerte de un
individuo, pues fue quizá el impacto y el cargo de conciencia en cierto modo el
que lo orillo a dar ese paso para su mejor condición de vida, aunque al final
muere en manos del líder de su grupo por supuesta traición.
Por otra parte, también se encuentra la parte de
dicha población que no necesariamente delinque para obtener la satisfacción de
dichas necesidades, sino que a pesar de la dificultad de poder mantenerse, se
dan la oportunidad de trabajar y colaborar en tareas simples en cierto aspecto,
pero bien ganado el pan y techo.
Ser un individuo de bajos recursos no es sinónimo de
delincuente, así mismo ser de clase posicionada no te coloca como buena
persona, aunque si por lo prejuicios que se anteponen a las acciones en primera
instancia y que juzgan inciertamente ante una realidad económica como algo ya
estipulado o etiquetado.
Concluyendo, “Los Olvidados” cautiva a todo que la
ve, o por lo menos se lleva en la reflexión algo por mas vano que esta
situación pueda parecer, a la cual nos hemos acostumbrado como sociedad, pues
hemos convivido sino de cerca con ello, si como parte del entorno, y es ahí
donde radica el problema, en que “nos acostumbramos” es decir, lo hemos hecho
ya parte normal de nosotros, pero tampoco se ha dado la solución plausible para
la disminución de esta condición que desgraciadamente en las últimas décadas ha
ido en incremento y que no solo afecta ya a la clase social baja sino a los
estratos en general. Es precisamente a ellos, a “Los Olvidados”, ese sector
vulnerable del que pocas veces volteamos a ver para ayudar, pero que sin
embargo damos queja de ellos a diario, desprecio en muchos casos y odio o
vergüenza en otros más, pues solo vemos como caen pero no tendemos la mano para
levantarlos, ya que vivimos en un mundo en que pareciera ser que no existen
pero que paradójicamente son el sustento nuestro, pues gracias al trabajo
“inferior” (como lo catalogamos muchas veces) que realizan es cómo podemos
tener los de “arriba” las diversas comodidades, el fruto servido en la mesa o el servicio necesario
para nuestra satisfacción. La reflexión de esto queda en cada uno de nosotros,
que vivimos a diario con problemas sociales pero que pocas veces trabajamos
para erradicarlos.
Vicente Flores.
Vicente Flores.
miércoles, 24 de julio de 2013
“El futuro de la democracia” N. Bobbio (puntos esenciales de su obra)
La democracia, la define Bobbio como el conjunto de
normas o reglas primarias y/o fundamentales que establecen QUIEN está
autorizado o facultado para tomar las decisiones colectivas y bajo que
procedimientos hacerlo. Hace un comparativo con respecto de los individuos que
tienen derecho al voto, contemplando tres vertientes, en las que una está
definida por ciudadanos varones mayores de edad, otra donde solo los
propietarios votan y una última donde las mujeres también están contempladas al
voto.
Se vislumbran dos vías de interdependencia entre un
Estado Liberal y un Estado Democrático: la de la línea que va del Liberalismo a
la Democracia y una segunda que va de la Democracia al Liberalismo. Con
respecto a la primera, se encuentran necesarias ciertas libertades para el
correcto ejercicio del poder democrático, y haciendo referencia a la segunda
instancia Democracia-Liberalismo, es indispensable el poder democrático para
poder garantizar la existencia y persistencia de las libertades fundamentales.
Bobbio conceptualiza dos ideales de la realidad, el de la
derecha- que refiere a una democracia que se ha transformado en un régimen semi
anárquico, teniendo como consecuencia la destrucción del Estado; por otro lado
contempla la fracción de izquierda, en el que la democracia parlamentaria se
está transformando cada vez más en un régimen autocrático. A partir de estas
dos concepciones podemos hablar sobre el nacimiento de la sociedad pluralista,
en la que el autor cita el nacimiento de la democracia desde una concepción
individualista de la sociedad, en que la sociedad política es el producto
artificial de la voluntad de los individuos.
Existen tres corrientes o vías por las que se caracteriza
la filosofía social de la época moderna, y que influyeron en la concepción
individualista de la sociedad y el Estado: el Contractualismo, la Economía
Política y la Filosofía Utilitatista.
Norberto Bobbio hace un
critica con respecto de lo estados
democráticos, aludiendo a que los grupos
se han vuelto cada es más los sujetos políticamente relevantes. No son los
individuos sino los grupos los protagonistas de la vida política en una
sociedad democrática, en la q ya no hay un solo soberano, ni el pueblo o la
nación compuesto por individuos que adquirieron el derecho de participar
directa o indirectamente del gobierno, el pueblo como una unidad ideal, sino el
pueblo dividido objetivamente en grupos contrapuestos, en competencia entra
ellos con su autonomía relativa respecto al gobierno central.
La democracia moderna, nacida como democracia
representativa, debería haber sido caracterizada por la representación
política, es decir, por una forma de representación en la que el representante,
al haber sido llamado a velar por los intereses de la nación, no puede ser
sometido a un mandato obligatorio. El principio en el que se basa la
representación política es exactamente la antítesis o contraposición de aquel
en el que se fundamenta la representación de los intereses, en la que el
representante, al tener que velar por los intereses particulares del
representado, está sometido a un mandato obligatorio.
Vicente Flores.
Vicente Flores.
“El futuro de la democracia” –N. Bobbio (análisis)
Hablar de democracia es entablar una serie de artilugios concatenantes
con respecto de una vía donde la mayoría elige, diría Bobbio, “La democracia
como el conjunto de normas o reglas primarias y/o fundamentales que establecen
QUIEN está autorizado o facultado para tomar las decisiones colectivas y bajo
que procedimientos hacerlo”, es quizá una definición bastante acertada y muy
digerible a la comprensión.
Existen dos vías de interdependencia entre dos conceptos que
bien pudieran parecer semejantes, pero que hay un hilo conductor entre ambos:
Estado Liberal y Estado Democrático. Con
respecto a la conducción que va del Liberalismo a la Democracia, podemos
encontrar necesarias ciertas libertades para el correcto ejercicio del poder
democrático; y en referencia a la vía de la Democracia al Liberalismo, dice
Bobbio, es indispensable el poder democrático para poder garantizar la
existencia y persistencia de las libertades fundamentales, así mismo asegura
que un estado no liberal, no asegura un correcto funcionamiento de la
democracia, pues si bien es cierto que como explicaba en líneas anteriores
pueden parecer semejantes los conceptos de democracia y liberalismo, hay un
hilo conductor entre la dos que la diferencia y que mantiene la estructura de
cada una, viciando necesariamente la una a la otra para completarse.
Existen condiciones necesariamente por las que la democracia
en esencia tiene concepciones tan adversas y empáticas al mismo tiempo, en la
doctrina pareciera una utopía y en la praxis una perversión, pero lo cierto es
que ha funcionado como un sistema de gobierno “equilibrado”, en el que es
indispensable aquellos que están llamados a elegir a quienes deberán decidir,
cayendo en la perversión de los grupos protagonistas de la vida política en la
que ya no hay un soberano sino que es el pueblo dividido objetivamente en
grupos contrapuestos en competencia con autonomía relativa al gobierno central.
Vicente Flores.
Vicente Flores.
martes, 16 de julio de 2013
“DOGVILLE” - primera película de la trilogía Estados Unidos: Tierra de Oportunidades.
Las
sociedades a lo largo de la historia han sido cambiantes en cuanto a su
percepción como en su actuar. Estas cambiantes percepciones y acciones, han
sido originadas por grandes cambios ya sea dentro de su estructura social,
económica, académica, etc. Sin duda alguna los cambios han sido en beneficio o
perjuicio para los integrantes de dicho grupo social en general, ya sea
denominados por un estatuto geográfico o puramente social o de género.
Dogville,
un poblado pequeño, con un número mucho muy reducido de habitantes, quizá los
suficientes para convivir y llevar a cabo cada uno actividades distintas como
el comercio, transporte, cuestiones religiosas, etc., todo ello indicando una
cierta “estabilidad” social. Esto mismo poder analizar en cada uno de las sociedades
y micro sociedades existentes, o como lo retomaran los culturalistas a las sub
culturas, cada uno de los personajes podríamos asimilarlos como la
representación de esos grupos en una sociedad, es decir, el personaje que es un
campesino, ante una sociedad en análisis representaría a la parte campesina y
del campo, las mujeres de la tienda representaran quizá a la parte comerciante,
y así cada uno de los personajes será la representación pura en dicha película
con respecto a los grupos o gremios existentes en las sociedades.
Como
mencioné en el párrafo primero, la sociedades siempre se encuentran en
constante cambio, unos serán más rápidos que otros, unos más serán más fuertes
o radicales; pero al final todos los cambios afectan ya sea en perjuicio o
beneficio para la sociedad. Ante estos inminentes cambios, habrá ocasiones en
que la sociedad podrá aceptar o no dichos cambios, y opinar para su aplicación
o su rechazo; Grace, aquella muchacha que huía de los “gangsters” por
circunstancias que de principio no se conocen, representa el cambio al que hago
referencia (todo ello representado como algún tipo de metáfora en la película
para el análisis que hago), un cambio al que en principio se temía, pues la
monotonía los ahorcaba y la confianza entre los habitantes era total. Como todo
cambio, fue difícil aceptarlo, sobre todo por el riesgo que representaba ésta al
no conocer su pasado, costumbres, ni detalles que pudieran dar una expectativa
positiva a la visión de aquella micro sociedad. Grace, puede representar
perfectamente ante la realidad, esa serie de cambios a los que la sociedad teme,
que procura con delicadeza y prefiere aún más no aceptarlos, aunque sea
inminente su imposición, pues la adaptación a estos nuevos regímenes conlleva
la erradicación de algunas acciones, aunque no sin antes decir que en su
mayoría pueden ser cambios en beneficio, pues la visión social cambia, el
pensamiento y la actitud; tal y como Grace lo hace, ella fue un claro ejemplo
en el filme de un benéfico cambio, trascendente si bien es cierto pero
necesario, pero fue necesaria su votación para poder permanecer y acceder a
ella, o al cambio que ella representa en sí misma.
Dogville
es una película con un campo de análisis muy amplio acerca de las acciones en
la sociedad, de su comportamiento y de la actitud frente a las diversas
circunstancias, en un enfoque especial de mi punto de vista al cambio y lo que
conlleva esto. Quiero cerrar con una frase del filme que me impacto y que
resume en todo aspecto al análisis anterior “…Eso los atemorizaría, pero no mejoraría nada. Todo podría repetirse si
alguien volviera a pasar por aquí y se mostrara vulnerable. Para eso quiero el
poder, si no te molesta. Para que el mundo sea un poco mejor.”
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