martes, 5 de noviembre de 2013

Para comprender mejor el ideal de justicia- ÉTICA NICOMAQUEA – ARISTÓTELES LIBRO V: DE LA JUSTICIA



La justicia siempre ha resultado ser un concepto que hemos usado por mucho tiempo, pero en pocas ocasiones nos ponemos a reflexionar sobre el verdadero sentido de lo que es la justicia, y que representa exactamente este concepto para nuestra vida en sociedad. Aristóteles por su parte, nos adentra en un análisis sobre las distintas aristas que presenta el término “justicia” y es así como lo aborda en su excelsa obra “Ética Nicomaquea” en su quinto libro.

Primeramente Aristóteles, hace una importante distinción entre la igualdad y la legalidad, adjudicando lo igual y lo legal a lo justo, y por ende, lo ilegal y desigual a lo injusto, siendo estas dos formas respectivamente, maneras de comprensión sobre una injusticia/ justicia total y una cierta especie de lo justo e injusto (igualdad-legalidad/desigualdad-ilegalidad); llama a la justicia la “virtud total” porque es un bien ajeno, es decir, no es el que emplea la virtud para si mismo, sino para otro. Por el contrario, a la injusticia la conceptualiza como  el “vicio todo”. Lo justo es lo igual y lo injusto lo desigual- pronuncia Aristóteles en su obra- hay un término medio de lo desigual que es lo igual, es decir, lo igual es el medio entre dos extremos (lo más y lo menos), por tanto supone dos cosas (los extremos), y lo justo es por lo tanto, una especie de medio y supone 4 términos: las personas par las cuales se da algo justo (son 2) y las cosas en las que se da (son 2).

Aristóteles nos plantea dos tipos de justicia, la distributiva y la correctiva. Respecto de la primera, responde a una justicia como igual, es decir, la distribución de honores o riquezas o de otras cosas que puedan repartirse entre los miembros de la república, en los cuales puede haber desigualdad e igualdad entre uno y otro; por tanto lo justo distributivo, se refiere a las cosas comunes y es siempre conforme a una proporción. Por su parte, la correctiva, responde a una justicia legal, es decir, que desempeña una función correctiva o conmutaciones privadas; de las cuales se desprenden dos partes: las transacciones privadas voluntarias, porque el principio de semejantes relaciones es voluntario, y respecto de las involuntarias, tenemos dos sub clasificaciones,  las clandestinas – hurto, adulterio, envenenamiento, etc.-, y las violentas – secuestro, homicidio, sevicia, robo con violencia, mutilación-.

La igualdad será la misma entre las personas que entre las cosas, si las personas NO son iguales, NO tendrán cosas iguales. Lo justo es proporcional- decía Aristóteles- lo proporcional es una igualdad de razones que se da en 4 términos: emplea un término como si fuesen dos y lo repite (A es a B, así B es a C). Pero también lo justo está determinado en 4 términos, la razón en una pareja es la misma que hay en otra pareja, es decir, como el primer término es al segundo, así el tercero será al cuarto (1:2 así 3:4), de la misma manera así como el primero es al tercero como el segundo será al cuarto (1:3 así 2:4). Así pues la unión (unión del 1 con el 3 y del 2 con el 4) es lo justo en la distribución, lo justo es entonces, como ya decíamos, un medio entre los extremos desproporcionados, porque la proporción (en este caso es una proporción continua) es un medio y lo justo una proporción, por tanto, lo injusto es lo que está fuera de la proporción lo cual puede ser en más o en menos. En la práctica dice el filósofo griego, que el que comete injusticia tiene más y el que la sufre, menos de lo que estaría bien. En el caso de lo justo como legal (justicia correctiva) la proporción será aritmética, aquí es indiferente la benignidad o maldad de las partes, sino que la ley atenderá a la diferencia del daño y trata como igual a las partes, solo ve si uno cometió injusticia y otro la recibió; en este caso, podemos hacer un símil, como se sabe, en la justicia distributiva se establecen dos extremos (más y menos) y un medio justo, en la justicia correctiva, tenemos como extremos al provecho (más) y a la pérdida (menos) con un  justo correctivo como medio. Más de lo bueno y menos de lo malo es el provecho, y de manera contraria será la pérdida.

Cuando entre los hombres existen disputas, recurren al juez, es decir, recurren a la justicia. El juez por tanto es al justicia animada, es un medio entre ellos “mediador”- por tanto cuando alcanzan el medio alcanzan la justicia-  y tiene como tarea principal en primer momento restaurar la igualdad, cuando el todo ha sido dividido en dos mitades iguales, se dice que cada uno tiene lo suyo. Lo justo indica la división en dos mitades (dikaion) y es preciso quitar al que tiene más y añadirle al que tiene menos; el provecho provendrá del que tiene más de lo que era antes era suyo,  y la pérdida el que tiene menos de lo que tenía al principio. Cuando NO se obtiene ni más ni menos, sino que las partes tienen lo que en un principio por sí mismas, se dice que cada tiene lo suyo, y no hay pérdida ni provecho. Lo justo aquí pues será, el medio entre cierto provecho y cierta pérdida en transacciones no voluntarias.

De lo justo político- dice Aristóteles- una parte es natural y otra legal. Lo natural lo define como lo que en todas partes tiene la misma fuerza y no depende de nuestra aprobación o desaprobación, por otro lado, lo legal es lo que en un principio resulta indiferente, pero que una vez constituidas las leyes deja de serlo. Lo que es por naturaleza está sujeto a cambio, lo cual no impide que ciertas cosas sean por naturaleza y otras no lo sean. De las cosas susceptibles de ser de otro modo, será por disposición de ley por convención, decidir cuales son por naturaleza y cuales no. Las cosas que son justas por convención y por conveniencia son semejantes a las medidas, y las cosas que no son naturales, sino por disposición humana, no son las mismas en todas partes.

La diferencia entre la acción injusta y lo injusto, así como entre la acción justa y lo justo, radica en que lo injusto lo es por naturaleza o disposición de la ley y esto mismo cuando se ejecuta, es por tanto una acción injusta, pero antes de ejecutarse ésta, no lo es aún, sino solo algo injusto. Lo mismo para el caso de lo justo y la acción justa. Se comete injustica o se obra justamente cuando alguno ejecuta esos actos voluntariamente, es decir, cuando se procede involuntariamente, ni comete injusticia ni obra justamente sino por accidente, porque aconteció ser justo o injusto lo que hacía. Si un acto es o de injusticia o justica, se determina por su carácter voluntario o involuntario; si es voluntario se le censura, y es al mismo tiempo un acto de injusticia sin ser aún un acto de injusticia  si no se le añade el ser voluntario. Asimismo los actos voluntarios pueden ser por elección o sin elección, siendo los primeros los que han sido objeto de una deliberación previa, y los segundos los hechos sin previa deliberación.

Existen pues tres especies de daños en las relaciones sociales, primeramente los causados por la ignorancia, pues son errores que se causan cuando se obra sin darse cuenta ni de la persona afectada, ni del acto, ni del instrumento, ni del fin. Como segundo punto, cuando los daños se producen contrariamente a una razonable previsión, es una desgracia; cuando n contrariamente a una razonable previsión, pero sin maldad, es un error culpable. Hay error culpable cuando el principio de ignorancia está en le agente, y hay desgracia cuando está fuera de él. Cuando se obra conscientemente pero sin previa deliberación, se comete un acto injusto, como todo lo que se hace por cólera o por otras pasiones en los hombres naturales o necesarias; y quienes por tales motivos perjudican y son responsables de tales errores, obran injustamente y los actos resultantes son injustos; sin embargo, quienes los hacen no son por ello injustos ni malvados, porque el daño no procede con maldad, pero cuando se obra por elección deliberada, se es injusto y malvado, dice Aristóteles.

No es posible que se cometa injusticia consigo mismo, la acción injusta no manifiesta la maldad en general, resultaría que estaría en poder del mismo individuo quitarse y adjudicarse simultáneamente la misma cosa; lo cual e imposible, puesto que lo justo y lo injusto de necesidad han de darse siempre entre varios. Pero el que se daña a sí mismo, padece y hace simultáneamente las mismas cosas, además si un hombre pudiese ser injusto consigo mismo, sucedería que voluntariamente sufriría injusticia.

Aristóteles sin duda alguna es reconocido como uno de los mejores filósofos de la historia, sus estudios y análisis nos han dejado como legado la comprensión de muchos fenómenos tanto del hombre como de la naturaleza. La Ética Nicomaquea no puede ser la excepción, y me remonto especialmente al libro quinto “De la justicia”. Hablar de la justicia puede parecer algo de lo que entendamos cotidianamente y de lo que en el mundo se lucha y vive día con día, pero en pocas ocasiones nos ponemos a analizar lo que verdaderamente implica la justicia. Aristóteles es precisamente lo que nos muestra en este apartado, da un detallado importante de los elementos conformantes de la justicia, aporta cuestiones para reflexionar, en esencia sobre la aplicación concreta a los casos y cuándo considerar justo o injusto una acción, bajo qué criterios debemos analizar las situaciones y de qué manera realizar una correcta clasificación de los actos humanos respecto de la igualdad o de la legalidad según sea el caso.

Un obra que a mi parecer es fundamental para los juristas, los estudiosos del derecho, para los abogados y quienes imparten justicia sobre todo, o en su defecto para quienes legislan, que a mi parecer esta reflexión sobre la justicia, ayuda en gran medida a comprender la naturaleza de los hechos y de los actos humanos, para así poder generar un correcto análisis y juicio, y más tarde aplicar la medida necesaria ya sea en una justicia distributiva o en una correctiva, como bien apunta Aristóteles.

2.    CONCLUSIÓN EN CUESTIÓN


Es necesario conocer la naturaleza de las implicaciones y elementos que conforman a la justicia, saber los extremos de los cuales se genera y sobre qué bases son sustentados los actos del hombre para poder ser considerados justos o injustos, de qué manera o en qué sentido lo son, y si en realidad resultan de la voluntad o de un error. Todo lo anterior, es necesario para la eficiencia del análisis al caso concreto y sobre todo  me parece importante para la legislación, pues es de estos elementos precisamente de donde se crean las leyes, sanciones, los reglamentos, etc.; de la misma manera para la impartición de justicia, en el sentido en que la Corte debe de tomar en cuenta todos los elementos del acto humano para considerarse un acto justo o injusto, pues es ella (la Corte) quien muestra los criterios de interpretación de la ley, y el sentido en qué ésta debe ser aplicada, esto para la eficiencia y correcta aplicación, pero sobretodo de la correcta impartición de justicia, buscar ese medio justo entre los extremos del que nos hablaba Aristóteles.

Vicente Flores.

lunes, 21 de octubre de 2013

SICARIO: AUTOBIOGRAFÍA DE UN ASESINO A SUELDO - MOLLY MOLLOY Y CHARLES BOWDEN



La inseguridad en nuestro país es un tema con el que vivimos desgraciadamente a diario, nos es tan común leer en los periódicos, o escuchar en las noticias al prender el televisor o la radio, sobre secuestros, robos, asaltos, violaciones, homicidios, etc., es algo con lo que hemos aprendido a convivir, algo que desde hace años aqueja no solo a la sociedad mexicana sino al mundo entero, aunque claro está que en algunos países es menor la estadística.

Pero sin duda alguna, algo de lo que no puede prescindir México en la actualidad es su “gran esfuerzo” por estar en los primeros lugares de las listas más populares de entre la delincuencia organizada, el tráfico de drogas y los asesinatos al por mayor; esto es el punto álgido de esta obra, y no precisamente del análisis de la delincuencia organizada y el tráfico de drogas desde un punto de vista externo sino desde su interior, desde su propia organización y funcionalidad, sus procesos de selección y adiestramiento, el reclutamiento y los políticos involucrados.

SICARIO es una palabra fuerte de pronunciar, implica terror y violencia, armas y homicidios, drogas y su distribución; todo eso y mucho más es lo que implica ser un asesino a sueldo, siempre pensando en el daño que nos pueden causar, o que en su conjunto hacen a este país, pero es cierto también que pocas veces nos ponemos a pensar en qué es realmente un sicario desde dentro, desde esa persona quien juega un papel dentro de la organización o cartel, ¿Qué es de él? ¿Cómo piensa? ¿Qué siente? ¿Le teme a algo o a alguien? Estas son preguntas verdaderamente interesantes de contestar, pero quien mejor que alguien que tiene este “trabajo” para contestarlas, saber desde una fuente fidedigna la información real y concreta de cómo realmente se maneja y se vive dentro de un cartel.

El Sicario, quien es el protagonista de esta obra, nos relata en un primer momento la forma de operar, es decir, como se llega a ser sicario, que pruebas se deben pasar, quienes los entrenan, etc; como primer punto se llega a ser sicario desde que te brindan el mínimo de confianza para estar en sus círculos de trabajo, eres seleccionado y adiestrado, las pruebas son difíciles para entrar, pasar semanas enteras realizando actividades recluido en alguna casa de seguridad del centenar que tienen bajo su mando, con la ausencia de tu familia, pero siempre pensando en que será lo mejor porque las grandes cantidades de dinero a ganar son quizá tan inimaginables y con tanta “facilidad” como jamás en tu vida hayas imaginado. El dinero y el poder son la principal razón por la que alguien accede a entrar a la delincuencia organizada, se necesita valor y grandes “pantalones” para atreverte a matar a alguien por dinero, secuestrarlo o torturarlo en su defecto; el trabajo sobre algún asesinato o secuestro conlleva de una precisa planeación, casi perfecta o perfecta, sin errores o el que terminará muerto será el sicario mismo.

El personaje principal nos relata de una manera vivencial las horribles torturas que practican, los métodos de sometimiento de las víctimas y el modo de operar en cada jerarquía, distingue perfecto de entre las tareas del sicario, ya sea que se dedique a matar, secuestrar, traficar, torturar, etc., cada uno tiene un rol específico y debe respetar. El dinero del “Jefe” es sagrado para quienes pretenden no pagar lo que debe, y resultan también víctimas de su propio equipo, nadie traiciona al “jefe” y quien lo hace lo paga con su vida. La familia de todos aquellos involucrados en este ambiente tan hostil pero tan abundante sin duda, resultan muchas veces ser parte de la misma organización, y no por participar activamente, sino porque se vuelven garantía de pago o de ajustes de cuentas. La vida es quizá lo más atesorado en este ambiente, vives en todo momento sujeto a un arma y tras el efecto de las sustancias que tú mismo traficas.

Se desenmascara asimismo, al gobierno, la policía y los militares, quienes pasaron de ser el blanco de ataque, a parte de la organización o cartel, nos muestra ejemplos de políticos que llegaron al gobierno de una entidad federativa o de un municipio, tras ser pactados con el mismo narco, tras ser financiados por ellos mismos; se muestra una policía corrompida desde sus más bajas jerarquías, donde el Estado mismo es quien los adiestra para incorporarse más tarde a algún grupo de acción de los cárteles, “los jefes” proporcionan sus incentivos monetarios a los cadetes del “honorable” cuerpo de policías, quienes reciben su “narcobeca” desde que son estudiantes, más del 40% de los policías que entran a la academia, se enlistan en algún cartel, y esto es apoyado firmemente por las autoridades, pues son ellas mismas quienes forman parte del narcotráfico.

La CIA y la DEA resultan ser elementos de capacitación para los mismos sicarios, es inimaginable que los propios organismos de acción antidroga del país “más poderoso” del mundo  sean corrompidas por grandes capos mexicanos, irónico resulta el hecho de que la DEA (Drug Enforcement Administration en sus siglas en inglés; en español: Administración de Cumplimiento de Leyes sobre las Drogas) sea actor contra el tráfico de drogas y a su vez coadyuve a la misma tarea. ¿En quién confiar ahora si nuestras mismas autoridades son parte de la delincuencia organizada? ¿Los ciudadanos que podemos esperar ahora sin la protección y seguridad pública?

El mismo presidente de la república muchas veces ignora que muchos de sus secretarios de estado (en el caso de Felipe Calderón como lo menciona el personaje principal) sean brazo derecho de los capos mexicanos, sean los medios a disposición para que todo el movimiento de la droga sea lo más fácil posible, de ahí viene el famoso accidente donde murieron el entonces secretario de gobernación Juan Camilo Mouriño y José Luis Santiago Vasconcelos en ese momento titular de la Subprocuraduría de Investigación Especializada en Delincuencia Organizada. Sin duda fue un hecho que conmocionó a la clase política del país y a la sociedad en general, y cuál fue la sorpresa, que fue como ya era esperado y sabido por muchos un “narcosabotaje”, Vasconcelos resultaba ser un político incomodo tanto para el narco como para el mismo gobierno involucrado, pues como dicen “donde ponía el ojo ponía la bala”, él investigaba un asunto hasta sus últimas consecuencias,  en múltiples ocasiones sacó a la luz información que resultaba de sus investigaciones arduas, resultó responsable de la aparición de muchas narcofosas y de algunos narcotúneles en el norte del país.

Creo que a estas alturas, en nuestros días, la sociedad mexicana ya no se sorprende de en lo que ahora se ha convertido la política en México, de una “narcopolítica”. El Estado ahora se volvió parte de una organización de narcotráfico, que subyace bajo una falsa opresión que en realidad es una substanciación y sostén de la mafia mexicana.


Múltiples son los detalles que te adentran en la lectura de este libro, que nos deja una lección de vida donde un sicario pasó de ser un asesino a sueldo a un soldado de Dios, donde el arrepentimiento se hizo presente en él, sabiendo que por ahora está vivo con su familia a quienes pudo salvar de las balas del cartel, pero que tampoco descarta su pronta muerte, pues él sabe que la muerte es algo con lo que vivió siempre, solo que ahora no será su acompañante sino su verdugo. 

Te invito a leer este relato que sin duda alguna como mexicanos tenemos que leer, ¿Por qué? Porque es una realidad con la que vivimos, misma que debemos afrontar, porque ninguno de nosotros está exento de ser víctima directa de este ambiente, porque víctimas ya somos toda la sociedad, ¿Qué podemos esperar ahora de nuestro gobierno? ¿Hemos llegado ya al límite de la sinvergüenza y el descaro de nuestras autoridades? 

Vicente Flores.

jueves, 17 de octubre de 2013

“NO MATARÁS –K. KIESLOWSKI




El hombre desde siempre, ha sido objeto de la influencia vanagloriada de la fe y de la divinidad que lo acompaña en su andar según las creencias que profesen cada uno de los individuos que se enmarcan per se en el contexto divino o religioso. Este marco del que hablo, se define si bien por mitologías en algunos casos, por hechos reales en otros; no deja de tener  una base firme que conduce al hombre a actuar de tal o cual manera según los preceptos que establece como “buenos” o “ideales”, según los cuales el hombre debe ser, actuar y quizá hasta sentir. Tal es el caso de la corriente judeocristiana, que se basa en preceptos básicos llamados “Decálogo”, dados por Dios a Moisés y éste a su vez al pueblo; dando a entender que eran las estipulaciones por las cuales el Dios en que todos ellos creían era lo que pedía de ellos.

El filme “No Matarás”, es quizá sino una representación concreta de lo que mencioné en líneas anteriores, si bien puede ser una representación ad hoc al tema mismo, es decir, vislumbramos en las escenas cuestiones por las cuales podemos preguntarnos, reflexionar o quizá en un momento dado hasta juzgar el porqué de una regla o mandato, porqué según la tradición hebrea fue dado por Dios, y hacia dónde se dirige la cuestión del 5to mandamiento del Decálogo o el porqué de este precepto.

La cuestión divina en este momento no nos compete pues no soy una persona especializada en ello, aunque mi culto religioso me lo permita. Vayamos más allá de presenciar, saber, o cometer un asesinato, aboquémonos a preguntarnos si nosotros tenemos la facultad de privar del derecho de la vida a alguien más, incluso a un animal como se muestra en la película, quizá de primera instancia todos, o al menos la mayoría contestaría que nadie es dueño de la vida del otro y por tanto no podemos decidir sobre él o ella ni sobre su destino. Pero me pregunto ¿Por qué si no somos o no tenemos el derecho de quitar la vida a alguien más lo hacemos? ¿Es quizá algo nato en el hombre? Son cuestionamientos que nos podrá llevar tiempo en contestar, pero en la reflexión no emite de inmediato a lo que estamos predispuestos moral y religiosamente, pues el asesinato no es bien visto ante ninguna divinidad, al menos en la mayor parte de los cultos religiosos. Es pensar en que nuestra libertad de hacer y deshacer se ve limitada solo por la libertad del otro, es decir, nuestra libertad tiene límites hasta donde la del otro comienza y le afecte nuestra acción.

¿Qué debo pensar de aquel hombre que priva de la vida a otro? O ¿Qué es lo que puedo suponer que piensa o siente alguien momentos después de haber cometido el acto? Es en verdad un análisis nada fácil, pues no todos somos asesinos y por tanto nos es difícil tener empatía con esos pensamientos; el vacio que una persona pueda sentir, su necesidad de algo o hacia alguien, su desesperación o coraje, son causantes de tal atrocidad, pensar tan siquiera que en nosotros pueda crearse un monstruo social, a través de la presión, del vacío, del inconformismo o cuales quieran que puedan ser las razones por las que alguien prive de la vida a otro. La crueldad, frialdad y brutalidad de un asesinato repulsivo es de la manera en que el hombre “civilizado” muestra que sigue siendo “animal”, que esa condición jamás podrá perderse, ya que es quizá la acción más común en la historia del hombre, a través de batallas, guerras, asesinatos u homicidios; algo natural podríamos decir, pero sin conciencia ni reflexión de por qué lo hacemos o de si nos corresponde hacerlo, pues que no todos ante la naturaleza somos libres y por tanto nadie es mayormente mejor o peor ante el otro? Entonces, por qué adjudicarnos ese derecho sobre el otro a través de la libertad que poseemos?  Interrogantes que no nos habíamos hecho tal vez, pero hemos de recordar que en la conciencia se lleva el acto y la penitencia más cruel es recordar a diario en lo que te has convertido después de matar. Porque después de matar no serás el mismo de antes, un monstruo social te has de convertir.
El difícil trabajo de un abogado siempre se torna en cualquier situación que a éste le compete en su capacidad litigante, pues su deber es defender los intereses de su cliente, conociendo previamente la situación y habiendo aceptado los términos en que esta se encuentra, tal y como es el caso de Piotr, quien era un estudiante de abogacía en una etapa clave de sus estudios, pues estaba por concluir sus estudios y se preparaba para hacer su examen de titulación y quien tiene la difícil tarea de defender a Jacek (protagonista del filme quien asesina a un taxista brutalmente) ante los tribunales que lo sentenciarían por el acto cometido. La sentencia en sí misma tiene el fin de castigar y hacer pagar al infractor por el hecho o acto que se le adjudica, pero por sí misma tiene un fin más profundo la sentencia, y es el de hacer “reflexionar” a dicho infractor acerca de su actuar y por tanto ayudarlo a reintegrarse a la sociedad de la que alguna vez formó parte con derechos y deberes. Pero me pregunto si el fin último de la sentencia es el que anteriormente mencioné, por qué dar la pena de muerte a alguien?,  si la reflexión en él no tendría lugar pues morirá sin tan siquiera percibir por completo el hecho. Esta es una de las cuestiones que más controversia pueda causar con respecto a este tópico, pues es como aplicar la Ley del Talión ¿ojo por ojo, diente por diente y …vida por vida?  Es quizá algo no podamos comprender pues en nosotros caben acciones y pensamientos que ni nosotros mismos podemos entender.

Finalmente, nos queda la reflexión de sobre si tenemos o no el derecho sobre el destino y vida de alguien, creo yo que este filme es una excelente apreciación sobre la vida y la muerte, y más sobre la conciencia de saber hasta qué punto somos capaces de llegar con nuestra propia libertad, la respuesta ya estará en cada uno de nosotros, independientemente del culto religioso que profesemos, la vida es sin duda un regalo maravilloso que se nos otorga, así que cada uno tenemos derecho a ella a pesar de nuestras acciones.
                 
Vicente Flores.

lunes, 7 de octubre de 2013

“La Naranja Mecánica” Stanley Kubrick -

Stanley Kubrick fue uno de los más grandes genios que haya dado el mundo al llamado séptimo arte, y cuya influencia dejó marcado al siglo XX a través de grandiosas obras fílmicas, entre ellas “A clockwork orange o en su título en español “La Naranja Mecánica”, cuya fama fue adquirida por la gran controversia que causó en el Reino Unido en los años 70 entre críticos del cine y diversos medios de comunicación sobre su contenido y la conmoción de los espectadores.

La historia de Alex (protagonista de la cinta) es sin duda un personaje singular frente a la psicología de otros personajes de la misma categoría o contexto en filmes distintos. La particularidad de Alex es en sí misma la ultra-violencia,  que muestra el claro alarde al daño ajeno y de lo cual él y su grupo disfrutaban que sin planearlo tan estratégicamente conjuntaban coactivamente hacia el o los individuos, y que de un lugar a otro iban en busca de la satisfacción de dicha filia; como segunda instancia tiene la tendencia y gusto por  la violación como ese afán de ver el sufrimiento de la victima frente al acto sexual al que él procedía y del cual él era el principal participe dentro del grupo como todo líder. Desde las primeras escenas de la película se muestra la rebeldía por parte de aquel inadaptado grupo de adolescentes, los cuales irrumpen toda norma social y moral que en la sociedad pudiera existir, dejando por doquier huella de la malicia que en ellos se plasmaba y del cual sembraban cierto terror en las personas de tanto quienes presenciaban los ataques como quienes eran receptores de los mismos. “Como a toda acción corresponde una reacción” mencionaría el ilustre Newton en su tercera Ley, los actos operados por el protagonista finalmente tendrían el merecido correspondiente tal y como la ley es en esencia coercitiva, después de sufrir la traición de su grupo en un acto delictivo en el que era participe como muchos otros, estos lo dejaron a su suerte dentro de la casa habitación donde yacían delinquiendo, el cuerpo policiaco llegó y fue arrestado como en ocasiones pasadas de las que había ya librado, pero que desgraciadamente en ésta  no sería así, pues su vida sufriría un cambio drástico para bien aunque en un acto coactivo por parte de la justicia a quien había falseado en anteriores ocasiones.

El camino que pasó Alex durante su proceso de “reinsertación a la vida social” tuvo dificultades que él mismo jamás concibió, pues el tratamiento que obtuvo no fue nada fácil, se trata del tratamiento  “Ludovico”, el cual muestra una clara eficacia en el cual el paciente se ve impedido a realizar un acto violento. Dicho tratamiento es irónico en cierto aspecto, pues utiliza la violencia misma aunque en imágenes, y las drogas, que bajo ese efecto el paciente se ve obligado a mirar dichas imágenes y provocar después de todo un repudio a la violencia, es decir, le causa un tipo de intolerancia a la misma. Un elemento importante de la historia es la inconfundible y grandiosa Novena Sinfonía de L. van Beethoven, la cual mostró gran conmoción y gusto al escuchar la interpretación de la Oda a la Alegría en voz de una dama en el bar lácteo Korova, quedó quizá tocado por dicha obra con la majestuosidad de los coros y timbrantes sonidos que a diario disfrutaba escuchar una y otra vez. Esta pieza así como le causó un tremendo gusto al oírla, de igual manera sería su tortura en dicha cura,  pues estas imágenes eran acompañadas por música clásica y después del tratamiento al tener contacto con esto le provoca un gran malestar, por lo que realizar el bien era la única salida que tenía.
El filme nos muestra claramente este llamado “control de la conducta”, del que se desprende el acto humano de discernir entre una acción u otra concibiendo la naturaleza del mismo, es decir, poder decidir entre un acto de bien o un acto de mal, que es a lo que generalmente podríamos adjudicar como concepción del “libre albedrío del hombre”.


Poder decidir entre el bien y el mal es una de las características que tenemos como seres humanos, es decir, es un acto puro del hombre el de tener la libertad de elegir qué hacer o qué no hacer, que sin esta capacidad sinceramente no seríamos más que animales en el más estricto sentido de la palabra, pues no tendríamos conciencia de nuestros actos propios y por tanto no tendrían sentido dichas acciones. Es así como trata de operar el tratamiento a Alex, condicionarlo a una u otra concepción sobre su misma libertad, pues él perdería dicha capacidad superponiendo una mayor seguridad y erradicación de todo acto vandálico al que pudiera tener acceso.


Finalmente, condicionar una conducta social tal y como hasta cierto punto lo hace el Derecho,  deja al aire la argumentación de sobre si ¿el libre albedrío es o no condicionado de igual forma?, a lo que quizá respondiendo por otro lado podamos tener una concepción inmediata hacia esto, pues el libre albedrío del hombre no es por tanto un acto que se pueda condicionar en su totalidad,  ya que a pesar de las represalias que tenga el individuo siempre podrá tener acceso a la capacidad de decidir sobre su actuar sean cuales sean las condiciones o circunstancias en el que éste se encuentre, el Derecho lo único que hará dentro de sus principales tareas será el regular dicha acción que del hombre surja como consecuencia de la capacidad única que tiene de discernimiento, a través del sistema normativo y de la coercibilidad que en su esencia mantiene aún en contra de la voluntad del hombre. 

Vicente Flores.

martes, 24 de septiembre de 2013

Democracia- G. Sartori

La panorámica que se da en cuanto a la democracia es sencilla, puesto que los pueblos antiguos tuvieron un proceso degenerativo en este aspecto. Podemos citar a un gran filósofo, un gran padre de la ciencia, las humanidades y cualquier materia en si misma del hombre puro, Aristóteles, quien se encargo de clasificar a la democracia como una de las más ruines formas de gobierno, a tal grado que la palabra misma fue considerada negativa por aproximadamente 2000 años.

Hoy en día tenemos una concepción distinta, ahora como refiere Sartori, es una abreviación que significa Liberal-democracia. Existiendo así al conceptualización de la “democracia igualitaria”, que no es más que la forma de gobierno reducida a un ideal general, que en su progreso  estima a una mayor igualdad. La democracia es un principio de legitimidad la cual hace referencia al poder, que  es legítimo por el simple hecho de que cada ciudadano tiene la libertad de ejercicio de poder emitir un sufragio para elegir a sus representantes los cuales a su vez proclaman y velan por el interés general del grupo que lo eligió, esto significa que la democracia es representación pura de la voluntad popular.

Existen sin duda contraposiciones que a mi juicio son extremas en cuestiones concretas y distantes en otras más con respecto de la democracia, hago referencia al Marxismo, que tiende a bien descalificar a la democracia de capitalista y burguesa, pero como señala Sartori con respecto de este tema especifico, haciendo ver el error causal del conflicto, pues critica de no llevar a cabo un papel adecuado en su territorio y con su población, siendo una democracia- dice Sartori- del comunismo realizado.

La democracia es un sistema político llamado a la resolución de problemas en el  ejercicio del poder,  donde la libertad política es la única llamada para dicho asunto, es especifica y practica, pues es base y esencia de la democracia, sin esta libertad, la democracia no tendría razón de ser, contemplando que es una Libertad frente y no para el Estado. Sartori comenta en su análisis, que la Libertad “para” es en grado menor frente a la autonomía, la cual implica a decir verdad, una libertad mayor.


Definir democracia pareciera ser muy sencillo, pues quizá tan solo un juego de vocablos que dan origen a una palabra, pero contemplar todo lo que ese juego silábico significa, nos ha llevado innumerables paginas, agotados autores y filósofos, que sin duda gran labor la que desempeñaron en su tiempo, pero que ahora nos dejan con un mayor número de interrogantes, algunas de ellas quizá no las imaginábamos antes de conocer lo que verdaderamente es democracia, me atrevo a decir que hoy en día seguimos sin saberlo.

Vicente Flores.

martes, 10 de septiembre de 2013

“ENSAYO SOBRE LA CEGUERA- J. SARAMAGO”



La humanidad tiene creo yo un sinfín de temores, unos más catastróficos que otros, pero sin duda, uno de los más terribles que puede marcar para siempre la vida de una persona, tanto en su supervivencia como en su manera dsobrepasar los obstáculos que ante ellos se oponen, ya sean físicos o psicológicos, es una doble y maratónica tarea de cada día, enfrentarlos y lograr pasarlos, pues es una necesidad nata la que tiene el ser humano de conocer su entorno a través de todos los sentidos, y el hacerlo sin uno de ellos, es fatídico.

Saramago comienza relatando un escenario demasiado desgastante quizá para toda persona citadina, y hago referencia en especifico a la multitud de autos en una ciudad tan caótica, y en el preciso momento de un alto en el semáforo, el primer caso de una extraña enfermedad que más adelante seria toda un epidemia, hace acto de presencia en un hombre, al parecer de una buena posición socio-económica. Más tarde, esta enfermedad sigue su curso y se presenta en una y en otra persona, en las mismas circunstancias fisiológicas que las anteriores.

A través del curso del tiempo, como mencioné con anterioridad, el número de personas afectadas por este mal aumentaron, por tanto fue necesario crear un tipo de refugio para estos enfermos, pues se creía era contagioso. El instinto de mantenerse con vida del ser humano, va sin duda más allá de nuestras propias expectativas, pues el no contar con un sentido tan vital como es el de la vista, es sentir la muerte en todo momento, pues no sabes lo que pasa a tu alrededorni puedes observar los detalles de las situaciones que a tu alrededor se llevan a cabo.

El liderazgo no se podía hacer esperar en este lugar, pues la convivencia con las personas que presentan tu misma condición en tu entorno inmediato, se convierte ahora de una necesidad a un obstáculo, pues no podrás identificar como es ni cómo actúa, al menos no con la rapidez con la que podrías hacerlo teniendo la vista. Es así como surgen los grupos divididos dentro de este “refugio”, pero para poder llevar cabo dicha convivencia se tienen que tornar posiciones encontradas en cuanto a la organización de dichos grupos, he aquí donde el hombre político-social sale a la luz para adaptar las necesidades de su grupo frente a las de los demás. El líder fue elegido, en unos “democráticamente” y en otros por auto denominación se nombrar “monarcas” de su grupo. Es aquí cuandorecordamos que el hombre jamás dejara de ser político, pues hasta en las condiciones más precarias y adversas, la necesidad organizacional y de liderazgo se hace presente, como si esto quizá ya fuera un instintoab origine.
¿Pero porqué no abocar esta situación a un entorno más plausible, donde las consecuencias de dicha enfermedad no sean físicas sino sociales y psicológicas? Es precisamente este análisis que desde mi perspectiva Saramago hace en torno a la sociedad moderna y su constante actuar afectando la estabilidad propia del hombre y de su entorno. Esta ceguera podemos asociarla claramente a un discapacidad no física por supuesto, sino a una discapacidad social, a un malestar que aqueja a individuos y que pareciera ser una epidemia, pues el hombre en la actualidad ha ido perdiendo su propia visión como ser humano, y se ha ido agregando a una visión individualista y egoísta,que como dijera Tocqueville, “este sentimiento (individualismo) es legitimo en tanto no conduce al hombre a los individuos apartarse de la sociedad… en consecuencia es necesario que el individualismo no conduzca a su forma más terrible que es el egoísmo”.

Un final, que por una parte es claro, pero por otra te deja a la reflexión al leer la narración y la descripción del autor acerca de cómo se vislumbraba la ciudad en ese momento, la desolación en que se encuentra como consecuencia de los recientes acontecimientos. La esposa regresa a casa con cierto descontento, impaciencia y quizá incomprensión, al no poder contener en sí misma la ardua tarea de la que se hizo cargo, y más aún de la carga mismo que esto conllevaba. Comienza a dar lectura a una Biblia, mientras la lectura iba avanzando, pareciera ser que el remedio a tanta catástrofe había llegado con dicha acción por parte de ella, que de pronto uno y otro comenzaban a recuperar la vista. Sin duda esto último, aunque metafórico en cierto aspecto, se denota claramente el mensaje infundido por el autor sobre sus enunciados.

Analizando el contexto anterior, puedo inferir sin temor a equivocarme, que la ceguera por la que está pasando el hombre dentro de sus respectivas sociedades, y reitero no como una insuficiencia física sino como una discapacidad social, ha sido consecuencia de una falta de identidad quizá, de una gran presión social y de un egoísmo muy marcado en todos los aspectos, pues no somos capaces muchas veces de actuar sin un beneficio para nosotros mismos, pero a la luz de la verdad (en este caso Saramago hace referencia a la Biblia en su metáfora) de las buenas acciones, del bien social, y de la formación de identidad y valores humanos, todos ellos contenidos en alguna doctrina religiosa quizá, es el camino por el cual “se caerá la venda de los ojos”  que no nos permite ver más allá de nuestra mundana realidad y de la cual nos privamos vivir en su maximización de múltiples beneficios tanto personales como colectivos.

martes, 27 de agosto de 2013

“El Proceso- F. Kafka”

Kafka sin lugar a duda fue y ha sido uno de los más grandes escritores y literatos del siglo XX. Su obra ha influenciado en gran medida a la literatura universal y a otros autores contemporáneos de manera innegable y que ha causado gran revuelo entre los críticos de la literatura, pues su obra ha sido muy polémica en cuanto al sentido estricto en el que se dé una interpretación real en función de distintas doctrinas que le critican. Un gran ejemplo es su obra “El Proceso” que fue considerada por el mismo autor como una obra inconclusa.

El Proceso, una obra magnífica en todo sentido, aborda diversas perspectivas de las cuales podemos partir para un análisis de las situaciones que en la historia juegan un papel muy importante puesto que envuelven al personaje principal (José K.) en una serie de artilugios en contra de sí mismo y en juego está su libertad al ser acusado de alguna pena que en principio desconoce y que seguirá desconociendo hasta su  inminente y fatal destino. En principio, el primer punto versus su libertad es la falta de “humildad” que tiene frente a la situación, es decir, se opone rotundamente y manifiesta, desde el comienzo, su notorio rechazo al proceso por el cual estaba pasando desde que fue irrumpido en sus aposentos de manera repentina por sujetos que en su vida había visto y que objetaban una pena que no le fue expuesta en ningún momento. Por consiguiente el actuar de K. no fue el más adecuado, como normalmente lo es en una persona que se encuentra en dicha situación, es decir,  en calidad de acusado, ya que su actuar fue agresivo desde el primero momento y no coadyuvo en principio con dicha situación.

El carácter arbitrario de la situación deja en claro que no es un aparato jurídico loable o mejor dicho no es competente en el sentido estricto de llevar la situación de K. puesto que no es legitimado su derecho a ser informado sobre la imputación que se le alude y de igual manera solo es obligado a ir a “declarar” y por tanto la violación a sus “garantías individuales y/o derechos humanos” fue sin ni más un paso que se dio en el proceso mismo en el que se le privó  sin importar tan siquiera las palabras de K. en defensa propia-  lejos de conocer su imputación- frente a la autoridad, quienes no lo juzgaron ni procesaron como normalmente debería de haber sido, y que por tanto no existía motivo alguno para su distinto proceso judicial.

La manera en que se llevó el proceso en contra de K. muestra una clara y real idea de cómo funciona el ciudadano frente al aparto burocrático y al Estado mismo, refleja la ignorancia del individuo frente a las situaciones legales, y cómo actuar ante ellas, puesto que muchas veces la intimidación  sirve como medio para sustraer la libertad de quien es procesado y de la misma manera es violentada la integridad del individuo en tanto que se hace presente el abuso de autoridad en todos los aspectos, la impartición de justicia se hace presente ni tan siquiera en el más mínimo detalle, he ahí donde las lagunas comienzan a hacerse visibles dentro del ámbito jurídico, pues son éstas las que se suman a la falta de congruencia en algunas leyes y por la cual la jurisprudencia no se lleva a cabo de manera más competente en los distintos casos establecidos.

Es de conocimiento general, o al menos debería ser así, que ningún individuo sea cual sea el interés o culpabilidad imputada, puede ser condenado sin previo juicio para un análisis de la situación en la que se vea inmerso dicho “presunto culpable” y que se demuestre verdaderamente el acto imputado y por el cual se le ha privado de la libertad. K. desgraciadamente no corrió con la misma suerte pues fue condenado a ser azotado, que sin una alusión al hecho del porque se tomó esa decisión, tan solo fue acatada por los agentes correspondientes y actuaron de manera visceral ante tal cuestión, pues el final era inminente y de ninguna manera aplazable pues el martirio de K. terminaría por fin aunque no en los mejores términos como hubiésemos deseado, fue privado de la vida de una manera cruel podemos decir, pues no fue en si la condena a la que fue dictaminado pero fue la suerte con la que corrió.

En conclusión, la obra de Kafka ha sido precursora de múltiples avances en cuestión jurídica y sobretodo de la materia penalista, ha sido forjador de criterios y análisis concretos de dicha materia; así mismo nos da pauta a la reflexión y análisis propio de nuestro sistema jurídico mexicano, de cómo actuamos frente a éste y como deberían de ser apreciadas las leyes para su mejor jurisprudencia y aplicación a la ciudadanía, que tiene como derecho conocer en su totalidad la funcionalidad de dicho sistema y como deberá actuar ante una situación determinada.

jueves, 15 de agosto de 2013

“El Señor de las Moscas” de William Golding

El hombre ha sido desde la antigüedad  un ser que necesita sin duda alguna vivir en sociedad, pues por sí mismo le sería difícil sobrevivir mucho tiempo, ya que en sus primeros años no es apto por sus propios medios de subsistir. A través del tiempo, se ha hecho mucho más compleja la manera en como los hombres dentro de sus agrupaciones van tomando orden, consciencia y poder, los cuales son necesarios para  mantener la estabilidad de sus mismos grupos. “El Señor de las Moscas”, es una historia que me cautivó ya hace algunos años al leerla y que ahora a través del tiempo y del estudio, puedo comprender la dimensión de dicha historia y del análisis tan profundo que se puede realizar en torno ella desde distintos puntos de vista.

Esta historia nos muestra claramente la necesidad de un “hombre social”, es decir, de un hombre que pese a circunstancias adversas en su entorno, mantiene la necesidad de convivencia, orden, de fuerza y supervivencia. Para poder lograr el control del grupo en la historia, se basan sobre un artículo encontrado por uno de los protagonistas (Piggy) y se trata de un caracol, que si bien es cierto, para la cultura mesoamericana es un símbolo muy preciado y un objeto que se le dio un importante uso en la época precolombina, tan importante que era utilizado en todo momento, pues su función era la de comunicar o anunciar, era el llamado de las masas; así mismo se prestó a la función para el grupo de infantes los cuales tomaban turno de opinión y respondían al llamado del caracol, a partir de este momento comienza a reflejarse otro punto muy importante distintivo del hombre, que es la imposición de una “regla”, la cual sería en todo momento acatada por el grupo a la que fue destinada y por la cual comenzará una nueva etapa a la que se une el orden y la organización, pues dicha regla se concreta en quien tenga el caracol tendrá el derecho de opinar frente al grupo, y lo cual da pauta también a la posesión del liderazgo del grupo por parte del “más fuerte”.

El poder ciertamente es una de las cuestiones más anheladas por el hombre, pues en esto engloba el control sobre las masas, la disposición de la riqueza y la decisión sobre todo lo que en su poder se encuentra reunido, tal y como nos los señalan Rousseau y Maquiavelo en sus obras alusivas a este tema. El poder es cedido por votos en “aparente democracia”, que quizá no podamos usar tal cual este adjetivo al acto de elección por parte del grupo hacia con Ralph para obtener el liderazgo en un principio, pues hablar de democracia implicaría mayor detalle, situaciones y circunstancias  que concebirían la misma como tal, pero quizá podamos dejarlo como “aparente” pues se puede poner en comparación al hecho mismo de efectuar el  sufragio por quien quieres que sea tu líder. A partir de que el poder es cedido, lo primero y más necesario para mantener como ya habíamos mencionado, la estabilidad dentro del grupo, será la imposición de reglas para la mejor convivencia, y es eso mismo lo que Ralph en un momento dado hace con sus ahora “seguidores”. Comienza el tiempo de la construcción de un campamento, que podamos comparar la acción a la de edificación de un imperio que estaría constituido por palacios, centros ceremoniales, etc. Da incio para el grupo de Ralph un momento lleno de características especiales con las cuales empezó de igual manera la civilización del hombre y el mejoramiento de sus condiciones se supervivencia, pues el fuego se hizo presente como un elemento indispensable para el ser humano, pues de ello depende mucho la vida, en consecuencia necesitará de alimento y este le será dado por una de las primeras actividades que realizó el hombre primitivo en grupo que fue la cacería, por medio de herramientas construidas por ellos mismos, y que en un paso anterior tendrán que manipular perfectamente para sobrevivir y para luchar, pues las fricciones entre el grupo comenzaban y las divisiones se hacían  cada día más marcadas entre quienes estaban con uno y con otro líder. Lo anterior también ha sido parte innegable de la naturaleza humana, que es la lucha por el poder, pues innumerables pueblos fueron divididos y en la actualidad lo son a consecuencia de la confrontación de ideales y malestares comunes.

 Por otro lado tenemos un personaje muy singular, del cual ya habíamos hablado en anteriores líneas, se trata de Piggy, de quien podamos hacer reflexión sobre su papel desempeñado dentro de la trama y que hago alusión a que funcionó como una especie de consejero, una “auctoritas” como era conocido el poder del Senado en la Antigua Roma, pues eran los prudentes quienes aconsejaban al rey acerca de sus decisiones, y es eso mismo lo que Piggy realizaba para con Ralph. Su desafortunada muerte causó un conflicto enorme dentro de quien recibía sus consejos – Ralph-y por quien algunas veces era guiado, Piggy pereció en su lucha por la conciliación y  la prudencia.

El acto criminal siempre ha sido parte también de la historia del hombre, y que verdaderamente ha causado conflictos enormes su presencia en distintas circunstancias y épocas, la manera de ser castigado un criminal dependerá de la sanción que coloque alguna ley expedida por el o los líderes acorde con el acto cometido, pues se debe castigar la mala conducta de algún miembro del grupo que afecta directa o indirectamente la armonía que en él se genera; esto mismo fue lo sucedido en dicha historia, donde aparece el acto de tortura con azotes públicos, como se solía realizar en algunos pueblos de las civilizaciones antiguas y modernas de igual manera. Es un acto de barbarie sin duda, pero el cual fue fructífero realizar durante siglos para enmendar la conducta de un miembro mal intencionado y que en cierta medida hoy aplicamos.

Habiendo analizado los rasgos característicos de la obra “El Señor de las Moscas”, desde un punto de vista histórico, sociológico quizá y antropológico en cierto sentido, nos damos cuenta que dicha historia contiene los matices necesarios para el análisis de una micro sociedad, de cómo el hombre es por naturaleza social, y de cómo quizá en algún momento comenzaron las primeras sociedades a partir de los rasgos humanos y animales que generamos en contacto con otro de nuestra misma especie; de cómo el hombre se vuelve “hombre” sin dejar de lado el sentido propiamente animal. 

Vicente Flores.

lunes, 29 de julio de 2013

“Los Olvidados” -Luis Buñuel

Durante la historia moderna del hombre, es decir, desde hace ya algunos siglos, en todo el mundo la división de clases ha sido marcada tajantemente por el sistema económico al que tengan acceso todos y cada uno de los miembros de una sociedad, y como se ha visto hasta ahora los que mejores oportunidades y posibilidades económicas tienen son los menos, esto se traduce en que el grueso de la población pertenece a una clase más baja, y qué decir de aquellos que viven la miseria misma, este panorama exactamente es el que nos presenta Luis Buñuel en su filme “Los Olvidados”, enfocando su atención y análisis total a esta última clase de la que he hecho mención: los de la clase baja.

Comenzaré así pues, con un pequeño fragmento que se menciona en el inicio de la película “[…] las ciudades modernas esconden bajo sus magníficos edificios, niños mal nutridos, sin higiene, sin escuela, semillero de futuros delincuentes […]” sin duda, estas palabras subyacen bajo un cúmulo de situaciones de la cruda realidad, como bien decían al comienzo, México no es excepción de esta realidad que en muchos países ricos y pobres existe, pues la clase baja es y será la más vulnerable a todos los males que aquejan a una sociedad. El delinquir es una situación o acción mejor dicho, que ha proliferado siempre en la clase baja, aunque justificada en cierto modo, pero no aplaudida ni solapada, ya que la necesidad que existe de cubrir los menesteres básicos de todo individuo, entre lo que destaca el alimento, elemento por el cual las disputas y riñas son paradójicamente “el pan de cada día”, pues en ocasiones nos muestra la película como es que tratan de conseguir satisfacer dichas necesidades. El vandalismo ha sido siempre una salida fácil para conseguir ciertas cuestiones, pues es mejor y más sencillo robar que trabajar para ganarlo.

Un elemento primordial influyente en este tipo de acciones sobre los jóvenes de la clase baja, es la falta de una figura que los guie y peor aún la desintegración familiar que se vive, y de la cual es muy común en dicho estrato, aunque cabe aclarar que no es especifico de la una clase los problemas de este tipo, sin embargo si son más propicias a darse en un estrato más bajo cabe mencionar por la dificultad de  satisfacción parcial o total de dichas necesidades. Este elemento mencionado en principio, creo yo va de la mano con la educación, pues aunque la educación no es garantía de cero vandalismo, es cierto que es una guía o camino por el cual los jóvenes se pueden mantener alejados de vicios y malos actos que perjudiquen su libertad. Como se vio en el filme, la autoridad no siempre es opresora en el sentido en que su fuerza la ejerza sobre el que delinquió para que pague por el delito cometido, sino se mostró un claro ejemplo de cómo a través de la oportunidad de la educación el Estado puede ser corrector en cierta medida a las acciones mediocres y negativas del individuo, tal es el caso de uno de los personajes, que por falta de atención de su madre, sin acceso a la educación y el medio en el que se desenvolvía propició a las malas conductas, y que se le dio la oportunidad después de un supuesto robo, acceder (aunque por la fuerza) a aprender un oficio, ofreciendo de tal manera el lleno total de los menesteres básicos como ropa, alimento, techo, etc., aunque si bien es cierto que no en las mejores condiciones, sí en la cobertura de tales. Otro de los elementos que me llamó la atención fue como marcó un acto de violencia la vida de dicho personaje, en el que daría pauta al inicio de su reformación a partir de su participación como espectador y cómplice de la muerte de un individuo, pues fue quizá el impacto y el cargo de conciencia en cierto modo el que lo orillo a dar ese paso para su mejor condición de vida, aunque al final muere en manos del líder de su grupo por supuesta traición.

Por otra parte, también se encuentra la parte de dicha población que no necesariamente delinque para obtener la satisfacción de dichas necesidades, sino que a pesar de la dificultad de poder mantenerse, se dan la oportunidad de trabajar y colaborar en tareas simples en cierto aspecto, pero bien ganado el pan y techo.
Ser un individuo de bajos recursos no es sinónimo de delincuente, así mismo ser de clase posicionada no te coloca como buena persona, aunque si por lo prejuicios que se anteponen a las acciones en primera instancia y que juzgan inciertamente ante una realidad económica como algo ya estipulado o etiquetado.


Concluyendo, “Los Olvidados” cautiva a todo que la ve, o por lo menos se lleva en la reflexión algo por mas vano que esta situación pueda parecer, a la cual nos hemos acostumbrado como sociedad, pues hemos convivido sino de cerca con ello, si como parte del entorno, y es ahí donde radica el problema, en que “nos acostumbramos” es decir, lo hemos hecho ya parte normal de nosotros, pero tampoco se ha dado la solución plausible para la disminución de esta condición que desgraciadamente en las últimas décadas ha ido en incremento y que no solo afecta ya a la clase social baja sino a los estratos en general. Es precisamente a ellos, a “Los Olvidados”, ese sector vulnerable del que pocas veces volteamos a ver para ayudar, pero que sin embargo damos queja de ellos a diario, desprecio en muchos casos y odio o vergüenza en otros más, pues solo vemos como caen pero no tendemos la mano para levantarlos, ya que vivimos en un mundo en que pareciera ser que no existen pero que paradójicamente son el sustento nuestro, pues gracias al trabajo “inferior” (como lo catalogamos muchas veces) que realizan es cómo podemos tener los de “arriba” las diversas comodidades, el fruto  servido en la mesa o el servicio necesario para nuestra satisfacción. La reflexión de esto queda en cada uno de nosotros, que vivimos a diario con problemas sociales pero que pocas veces trabajamos para erradicarlos. 

Vicente Flores.

miércoles, 24 de julio de 2013

“El futuro de la democracia” N. Bobbio (puntos esenciales de su obra)

La democracia, la define Bobbio como el conjunto de normas o reglas primarias y/o fundamentales que establecen QUIEN está autorizado o facultado para tomar las decisiones colectivas y bajo que procedimientos hacerlo. Hace un comparativo con respecto de los individuos que tienen derecho al voto, contemplando tres vertientes, en las que una está definida por ciudadanos varones mayores de edad, otra donde solo los propietarios votan y una última donde las mujeres también están contempladas al voto.

Se vislumbran dos vías de interdependencia entre un Estado Liberal y un Estado Democrático: la de la línea que va del Liberalismo a la Democracia y una segunda que va de la Democracia al Liberalismo. Con respecto a la primera, se encuentran necesarias ciertas libertades para el correcto ejercicio del poder democrático, y haciendo referencia a la segunda instancia Democracia-Liberalismo, es indispensable el poder democrático para poder garantizar la existencia y persistencia de las libertades fundamentales.

Bobbio conceptualiza dos ideales de la realidad, el de la derecha- que refiere a una democracia que se ha transformado en un régimen semi anárquico, teniendo como consecuencia la destrucción del Estado; por otro lado contempla la fracción de izquierda, en el que la democracia parlamentaria se está transformando cada vez más en un régimen autocrático. A partir de estas dos concepciones podemos hablar sobre el nacimiento de la sociedad pluralista, en la que el autor cita el nacimiento de la democracia desde una concepción individualista de la sociedad, en que la sociedad política es el producto artificial de la voluntad de los individuos.

Existen tres corrientes o vías por las que se caracteriza la filosofía social de la época moderna, y que influyeron en la concepción individualista de la sociedad y el Estado: el Contractualismo, la Economía Política y la Filosofía Utilitatista.

Norberto Bobbio hace un critica con respecto de lo estados democráticos, aludiendo a que  los grupos se han vuelto cada es más los sujetos políticamente relevantes. No son los individuos sino los grupos los protagonistas de la vida política en una sociedad democrática, en la q ya no hay un solo soberano, ni el pueblo o la nación compuesto por individuos que adquirieron el derecho de participar directa o indirectamente del gobierno, el pueblo como una unidad ideal, sino el pueblo dividido objetivamente en grupos contrapuestos, en competencia entra ellos con su autonomía relativa respecto al gobierno central.


La democracia moderna, nacida como democracia representativa, debería haber sido caracterizada por la representación política, es decir, por una forma de representación en la que el representante, al haber sido llamado a velar por los intereses de la nación, no puede ser sometido a un mandato obligatorio. El principio en el que se basa la representación política es exactamente la antítesis o contraposición de aquel en el que se fundamenta la representación de los intereses, en la que el representante, al tener que velar por los intereses particulares del representado, está sometido a un mandato obligatorio.

Vicente Flores.

“El futuro de la democracia” –N. Bobbio (análisis)

Hablar de democracia es entablar una serie de artilugios concatenantes con respecto de una vía donde la mayoría elige, diría Bobbio, “La democracia como el conjunto de normas o reglas primarias y/o fundamentales que establecen QUIEN está autorizado o facultado para tomar las decisiones colectivas y bajo que procedimientos hacerlo”, es quizá una definición bastante acertada y muy digerible a la comprensión.

Existen dos vías de interdependencia entre dos conceptos que bien pudieran parecer semejantes, pero que hay un hilo conductor entre ambos: Estado Liberal y  Estado Democrático. Con respecto a la conducción que va del Liberalismo a la Democracia, podemos encontrar necesarias ciertas libertades para el correcto ejercicio del poder democrático; y en referencia a la vía de la Democracia al Liberalismo, dice Bobbio, es indispensable el poder democrático para poder garantizar la existencia y persistencia de las libertades fundamentales, así mismo asegura que un estado no liberal, no asegura un correcto funcionamiento de la democracia, pues si bien es cierto que como explicaba en líneas anteriores pueden parecer semejantes los conceptos de democracia y liberalismo, hay un hilo conductor entre la dos que la diferencia y que mantiene la estructura de cada una, viciando necesariamente la una a la otra para completarse.



Existen condiciones necesariamente por las que la democracia en esencia tiene concepciones tan adversas y empáticas al mismo tiempo, en la doctrina pareciera una utopía y en la praxis una perversión, pero lo cierto es que ha funcionado como un sistema de gobierno “equilibrado”, en el que es indispensable aquellos que están llamados a elegir a quienes deberán decidir, cayendo en la perversión de los grupos protagonistas de la vida política en la que ya no hay un soberano sino que es el pueblo dividido objetivamente en grupos contrapuestos en competencia con autonomía relativa al gobierno central.

Vicente Flores.

martes, 16 de julio de 2013

“DOGVILLE” - primera película de la trilogía Estados Unidos: Tierra de Oportunidades.



Las sociedades a lo largo de la historia han sido cambiantes en cuanto a su percepción como en su actuar. Estas cambiantes percepciones y acciones, han sido originadas por grandes cambios ya sea dentro de su estructura social, económica, académica, etc. Sin duda alguna los cambios han sido en beneficio o perjuicio para los integrantes de dicho grupo social en general, ya sea denominados por un estatuto geográfico o puramente social o de género.

Dogville, un poblado pequeño, con un número mucho muy reducido de habitantes, quizá los suficientes para convivir y llevar a cabo cada uno actividades distintas como el comercio, transporte, cuestiones religiosas, etc., todo ello indicando una cierta “estabilidad” social. Esto mismo poder analizar en cada uno de las sociedades y micro sociedades existentes, o como lo retomaran los culturalistas a las sub culturas, cada uno de los personajes podríamos asimilarlos como la representación de esos grupos en una sociedad, es decir, el personaje que es un campesino, ante una sociedad en análisis representaría a la parte campesina y del campo, las mujeres de la tienda representaran quizá a la parte comerciante, y así cada uno de los personajes será la representación pura en dicha película con respecto a los grupos o gremios existentes en las sociedades.

Como mencioné en el párrafo primero, la sociedades siempre se encuentran en constante cambio, unos serán más rápidos que otros, unos más serán más fuertes o radicales; pero al final todos los cambios afectan ya sea en perjuicio o beneficio para la sociedad. Ante estos inminentes cambios, habrá ocasiones en que la sociedad podrá aceptar o no dichos cambios, y opinar para su aplicación o su rechazo; Grace, aquella muchacha que huía de los “gangsters” por circunstancias que de principio no se conocen, representa el cambio al que hago referencia (todo ello representado como algún tipo de metáfora en la película para el análisis que hago), un cambio al que en principio se temía, pues la monotonía los ahorcaba y la confianza entre los habitantes era total. Como todo cambio, fue difícil aceptarlo, sobre todo por el riesgo que representaba ésta al no conocer su pasado, costumbres, ni detalles que pudieran dar una expectativa positiva a la visión de aquella micro sociedad. Grace, puede representar perfectamente ante la realidad, esa serie de cambios a los que la sociedad teme, que procura con delicadeza y prefiere aún más no aceptarlos, aunque sea inminente su imposición, pues la adaptación a estos nuevos regímenes conlleva la erradicación de algunas acciones, aunque no sin antes decir que en su mayoría pueden ser cambios en beneficio, pues la visión social cambia, el pensamiento y la actitud; tal y como Grace lo hace, ella fue un claro ejemplo en el filme de un benéfico cambio, trascendente si bien es cierto pero necesario, pero fue necesaria su votación para poder permanecer y acceder a ella, o al cambio que ella representa en sí misma.


Dogville es una película con un campo de análisis muy amplio acerca de las acciones en la sociedad, de su comportamiento y de la actitud frente a las diversas circunstancias, en un enfoque especial de mi punto de vista al cambio y lo que conlleva esto. Quiero cerrar con una frase del filme que me impacto y que resume en todo aspecto al análisis anterior “…Eso los atemorizaría, pero no mejoraría nada. Todo podría repetirse si alguien volviera a pasar por aquí y se mostrara vulnerable. Para eso quiero el poder, si no te molesta. Para que el mundo sea un poco mejor.”